Rosa Romero, presidenta de la Comisión de Igualdad del Senado.
El Senado quiere sentar las bases de la que sería la primera
estrategia española de salud y género. Y, aunque el camino se presume largo, los grupos lo comenzarán a recorrer de forma casi inminente.
Rosa Romero, presidenta de la Comisión de Igualdad de la Cámara Alta, avanza a
Redacción Médica que el
Observatorio de Salud prepara una jornada de trabajo tras el verano para “escuchar” a profesionales de sanidad y responsables políticos y esbozar medidas que aporten una mayor
“perspectiva de género” al Sistema Nacional de Salud (SNS). "Es una cuestión que no se está abordando y que es necesario abordar", defiende.
Recientemente, la propia Romero recibió de manos de la presidenta y la directora del Observatorio de Salud,
Patricia del Olmo y Marta Riesgo, el
‘Libro Blanco Salud y Género’, en el que se analizan las inequidades entre sexos en el acceso a la atención sanitaria. Durante el encuentro, en el que también participó el portavoz del PP en la Comisión de Sanidad,
Enrique Ruiz Escudero, los mandatarios conservadores se comprometieron a trabajar para “incorporar acciones
políticas sanitarias con perspectiva de género”, así como a “garantizar la prevención, la mayor precisión en el diagnóstico” a las mujeres.
Un 40% de mujeres termina padeciendo enfermedades crónicas frente al 30 por ciento de los hombres
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Según
Romero, quien en el pasado fue también presidenta de la Comisión de Sanidad del Congreso, las razones para articular una estrategia nacional de salud y género se encuentran en este libro blanco del Observatorio de Salud. Una de las más significativas es que, en España, hasta un 40 por ciento de mujeres (10 puntos más que los varones) termina padeciendo una enfermedad crónica. En los
ensayos clínicos ellas suelen estar menos representadas, lo que conlleva que en ciertas patologías (entre ellas, el
ictus) no se tengan en cuenta factores como los cambios hormonales propios de la menopausia o la etapa reproductiva.
“Lo que se concluye de todo ello es que
hace falta una estrategia de salud y género nacional donde se establezcan las políticas sanitarias que incorporen una perspectiva de género”, desliza la presidenta de la Comisión de Igualdad, quien incide en que otros países ya tienen desplegados planes de esta naturaleza.
Medidas para la estrategia de salud y género
Formar a los sanitarios en perspectiva de género, incentivar la participación de la mujer en ensayos clínicos,
mejorar su acceso al SNS y mejorar los protocolos de atención temprana a víctimas de violencia de género constituyen algunas de las medidas que el Senado pondrá sobre la mesa. También la de fomentar la
incorporación de las mujeres en los cargos de toma de decisiones, enfatiza Romero.
La dirigente conservadora avanza a
Redacción Médica que el Observatorio de Salud ha emplazado a los grupos a realizar una jornada de trabajo sobre género tras el verano para comenzar a dar respuestas a todas estas problemáticas. “Iremos por partes, pero estamos
comprometidos en trabajar en esa línea”, asevera. Advierte, eso sí, de que la actuación de las comunidades autónomas será esencial para desarrollar este tipo de políticas “en el ámbito de su competencia”.
Impulso de políticas de igualdad de género en el SNS
De forma paralela, el Ministerio de Sanidad viene trabajando también en
promover políticas de igualdad de género en el SNS. En los VII Premios Sanitarias organizados por este periódico, la titular del departamento,
Mónica García, apeló entre otros factores en la subestimación de síntomas, las
diferencias en el trato del dolor y la desigualdad en la investigación científica.
“Hay que incluir a la mujer de forma paritaria en los estudios y en los ensayos clínicos, y tener en cuenta las diferencias de género en la
sintomatología, en el diagnóstico, en el
tratamiento hospitalario y en el farmacológico”, defendió la ministra, quien catalogó de “imprescindible” la colaboración con las sociedades científicas para alcanzar este objetivo.
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