Fachada del Congreso de los Diputados.
El
Ministerio de Sanidad asegura que "no existe" ningún
proceso de "privatización" en marcha en el
Hospital Comarcal de Melilla. Lo ha hecho mediante una respuesta parlamentaria publicada por el Gobierno, tras haber sido señalado por parte de la
Confederación Estatal de Sindicatos Médicos de una falta de transparencia. La denuncia ha sido trasladada al Ejecutivo por parte del
Grupo Popular, que pedía una justificación en este sentido.
Esta recriminación había sido publicada por el
Sindicato Médico de Melilla en su perfil de ‘X’, en un mensaje en el que exponían que existían "
procesos de privatización del Hospital Comarcal" y que estos no se estaban mostrando de manera clara. En concreto, aludían la "privatización" del servicio de
colonoscopias y
gastroscopias en horario de fin de semana y la realización de un concreto externo para cubrir la falta de profesionales de
Dermatología, entre otras cuestiones.
Por ello, y con la intención de solicitar al
Gobierno sus previsiones de cara a “impulsar alguna medida” ante esta problemática, el
PP trasladó a la
Mesa del Congreso de los Diputados esta cuestión, que fue
desmentida por el Ejecutivo en el Boletín Oficial de las Cortes Generales publicado este lunes.
Procedimientos de contratación del Ingesa
Como justificación ante este planteamiento, el Gobierno detalla en su respuesta que los
procedimientos de contratación de las obras, servicios, y suministros del
Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa), se tramitan conforme a la
ley de Contratos del Sector Público.
Por esta normativa, detallan que se transponen al ordenamiento jurídico español las Directivas del Parlamento europeo y del Consejo de la Unión Europea. Estas se publican en el
Boletín Oficial del Estado y en la Plataforma de Contratación del Sector público, para garantizar "la publicidad y la
transparencia" de los procedimientos, concluye el Ejecutivo.
Denuncia del Sindicato Médico de Melilla
La denuncia del
Sindicato Médico de Melilla recogía también que los procedimientos relacionados con
pruebas digestivas se llevan a cabo “sin plan de contingencia, con pacientes susceptibles de complicación” y en un horario en el que los facultativos de
cuidados intensivos “se encuentran de
guardia y no con la plantilla habitual de los días laborables”.
"Todas estas privatizaciones, además de opacas,
fortalecen la sanidad privada en detrimento de la pública, y son el reconocimiento implícito de que las reivindicaciones que dieron inicio a la
huelga de médicos son justas y totalmente necesarias para garantizar una atención de calidad", sentencia el síndicato. Junto a esto, reprocha el desborde de este tipo de servicios y la falta de médicos MIR en las plantillas "cortas y envejecidas" de Melilla.
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