Guía de buenas prácticas y reforma del RD 2003 contra las listas de espera

La ministra de Sanidad, Mónica García, ha anunciado que su departamento trabajará en la actualización del Real Decreto de listas de espera de 2003, que ha definido como “obsoleto”. “Nos facilitará ampliar los indicadores, permitiéndonos una visión más detallada de las necesidades del sistema, incluyendo la recopilación de áreas críticas como la Psicología, para la que actualmente carecemos de información”, ha detallado en su comparecencia, este jueves, en la Comisión de Sanidad del Senado, la primera que acoge la Cámara Alta en esta legislatura desde su constitución el pasado 5 de diciembre. En este sentido, también se ha comprometido a elaborar un Libro blanco de buenas prácticas de gestión en colaboración con expertos y comunidades autónomas para “estandarizar y optimizar las estrategias de reducción de listas de espera basándonos en las experiencias y en las evidencias científicas”.

“Es inaceptable enfrentar esperas que se extienden más allá de lo razonable”, ha afirmado, con contundencia, García, que ha desgranado las líneas generales de las políticas de su departamento a petición de los grupos parlamentarios Popular, Izquierdas por la Independencia, Izquierda Confederal y Plural. La ministra ha recordado que, de acuerdo a los últimos datos publicados por Sanidad a mediados de 2023, casi 820.000 pacientes aguardaban una intervención quirúrgica -un 10 por ciento más respecto a la actualización anterior-, con una espera promedia de 112 días para cirugías y 87 para consultas especializadas.

La normativa aludida por García es el RD 605/2003, de 23 de mayo, que vela por el tratamiento homogéneo de la información sobre las listas de espera en el Sistema Nacional de Salud (SNS) en base a la mayor o menor premura con la que un paciente necesita asistencia sanitaria. Tal y como ya recordó Redacción Médica en febrero, en su anexo III se distinguen varios niveles de prioridad para asegurar la equidad en el acceso a consultas externas, pruebas diagnósticas y terapéuticas, e indicaciones quirúrgicas.

Nuevo viraje a la estratección para reducir listas de espera

El anuncio de la ministra, de llevarse a efecto, supondría un nuevo viraje en la estrategia del Gobierno para paliar los altos índices de espera sanitaria, un compromiso adquirido por PSOE y Sumar y reflejado de forma expresa en su acuerdo de Gobierno de coalición firmado en octubre. Si bien es cierto que en un principio el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, aún en campaña, habló del futuro impulso de una ley de listas de espera, durante su discurso de investidura rebajó sus pretensiones y se refirió a un “plan para lograr una reducción drástica de las listas de espera” que se pondría en marcha “con los gobiernos autonómicos que así lo deseen”. La posibilidad que ahora ha puesto sobre la mesa García abre una nueva vía al respecto que desde Podemos ya habían deslizado a este medio previamente.

“Se trata -la reducción de las listas de espera- de uno de los grandes desafíos para ensanchar nuestro sistema sanitario”, ha asegurado la titular de Sanidad, que ha argumentado ese “problema” tiene “múltiples consecuencias y excluye a muchos de nuestros ciudadanos de nuestro sistema sanitario, compromete la calidad de la atención y la confianza en el sistema, perpetúa la angustia y deteriora la salud, incluyendo la salud mental”.

Tramitación del plan antitabaquismo

Al margen de ello, la ministra ha recordado que su departamento se halla en la "parte final" de la revisión del Plan Integral contra el Tabaquismo, un borrador que se vota este jueves en la Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud. "Si se aprueba, iniciaremos el proceso para su implantación legislativa", ha señalado.

Gratuidad de preservativos a jóvenes contra las ETS

García también ha anunciado que el ministerio está estudiando la posibilidad de que la adquisición de preservativos esté cubierta por el SNS y, por ende, sea gratuito en las farmacias para la población joven de entre 14 y 22 años, "que es la que tiene menor poder adquisitivo". "No tiene sentido que se cubra una vacuna para evitar una infección, pero no un método de barrera", ha dicho.

Al respecto, ha indicado que se elaborará una nueva encuesta de salud sexual, la última de las cuales data de 2009, ante "el incremento de las enfermedades de transmisión sexual (ETS) en los últimos años". "Debemos incorporar la innovación, ampliar el acceso por parte de los profesionales sanitarios a los test rápidos para mejorar la prevención y facilitar las autotomas", ha añadido.

Para la ministra, todo ello se enmarca en la necesaria actualización de la Estrategia de Salud Sexual y Reproductiva "para que aborde todas estas cuestiones ni desde el miedo ni desde la culpa".

Adaptar la sanidad al siglo XXI y "ensanchar el SNS"

En general, la titular de Sanidad ha resumido los "grandes retos" de su departamento aludiendo a los mismos aspectos que ya mencionó en su puesta de largo en la Comisión del Congreso: la salud mental, la Agencia de Salud Pública y el cambio climático, todo ello bajo la filosofía de "recuperar el orgullo de la sanidad pública, adaptar nuestra sanidad al siglo XXI y ensanchar el SNS".

García se ha mostrado beligerante contra la corrupción sanitaria para evitar "que se vuelva a hacer negocio con la salud", en base a lo cual se ha comprometido a "blindar el SNS de cualquier recorte robusteciendo la Atención Primaria y la Salud Pública, crear la Agencia Estatal de Salud Pública para asegurar reservas estratégicas de contramedidas médicas que nos protejan del fraude y prevenir la corrupción sanitaria con controles más rigurosos".

Además, ha anunciado el desarrollo de un programa específico de prestaciones en el ámbito de la rehabilitación y medicina física para personas con enfermedades neuromusculares. En ese contexto se incluye la actualización del documento de Abordaje de la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) y la revisión de la cartera de servicios del SNS en lo relativo a las enfermedades neuromusculares, algo que se reclamó esta semana en la Cámara Baja antes de votarse la ley ELA del PP que acabó aprobándose.