Pablo Martín, presidente de Fedop.
El sector de la Ortopedia denuncia el
incumplimiento por parte del Ministerio de Sanidad de su obligación -establecida por ley- de revisión anual de los
Importes Máximos de Financiación (IMF). Concretamente, desde la Federación Española de Ortesistas y Protesistas (Fedop) manifiestan una gran preocupacion por esta situación, agravada también por los numerosos sobrecostes.
"Puede haber una incidencia en el coste de la prestación ortoprotésica por los
sobrecostes e inflación que padecemos, que ha supuesto un
aumento del 49 por ciento de coste en muchos de los productos, sin tener reflejo en sus IMF, lo que pone en
peligro la prestación ortoprotésica", sostienen.
En este sentido, si siguen sin
adecuarse los IMF a la realidad económica, las empresas fabricantes y las ortopedias habrá un momento en el que no puedan hacer frente a estos costes. Al final, esta situación perjudica también a los pacientes, ya que no solo se puede
reducir la dispensación de ciertos productos, sino también la capacidad de
incluir las últimas innovaciones del mercado.
Según detallan desde Fedop, los importes actuales
se basan en datos anteriores al año 2019 y en este tiempo la inflación ha afectado notablemente al sector, especialmente en los últimos años. No obstante, el ajuste depende de cada producto, pero
rondaría entre el 15 y el 25 por ciento.
"Escasa inversión" del SNS en Ortopedia
A todo ello hay que sumarle también la
"escasa inversión" del Sistema Nacional de Salud (SNS) en prestaciones ortoprotésicas (212.256.601 euros en 2021, lo que supone una media de 4,48 euros por habitante y año, según sus datos). En palabras de la federación, este presupuesto se ha
limitado a productos básicos "sin atender a las necesidades reales de los pacientes". Por lo tanto, otra de sus peticiones es un aumento de la inversión en Ortopedia del 20 por ciento, lo cual supondría un ahorro "muy superior" al SNS gracias al
aumento de la eficiencia y a los costes en los que dejarían de incurrir el sistema sanitario y el social.
Concretamente, para lograr reducir gastos se pueden incluir en el catálogo productos que ahora están excluidos, como son las
ortesis plantares y craneales y las sillas de bipedestación electrónicas; o ampliar el uso de otros (rodillas electrónicas, corsés para escoliosis o asientos posturales).
De hecho, la federación que preside Pablo Martín sostiene que con este aumento en la inversión "se evitarían males mayores y secuelas al ser
tratados de forma precoz, reduciendo el número de bajas laborales, incapacidades, etc".
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