Los fisioterapeutas buscan indicar y alterar las pautas de los fármacos que interfieren en su trabajo diario

La prescripción en Fisioterapia pide paso: "No habría controversia médica"
El presidente del Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas de España, Gustavo Paseiro, y el presidente de la Asociación Española de Fisioterapeutas, Fernando Ramos


15 sept. 2024 14:00H
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Los fisioterapeutas también se apuntan a la prescripción de medicamentos. El presidente del Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas de España, Gustavo Paseiro, ha propuesto a la ministra de Sanidad, Mónica García, el desarrollo de la normativa que permita la indicación, uso y autorización de determinados fármacos por parte de los mencionados profesionales. El organismo colegial, que cuenta con el apoyo de la Asociación Española de Fisioterapeutas (AEF), ha centrado su atención en aquellos productos no sujetos a receta médica o la toma de decisiones farmacológicas durante el proceso asistencial -por ejemplo, la retirada gradual de una sustancia-, aunque no descarta la inclusión de guías que les permitan trabajar con tratamientos para los que se necesita el visto bueno del facultativo. 

"La vocación de la Fisioterapia no es implementar de forma indiscriminada fármacos, ya que somos una alternativa a los mismos. Sin embargo, hay procesos en los profesionales deben tener la autorización legal para poder tomar decisiones sobre la indicación y uso de un determinado medicamento que guarde una relación estrecha con nuestros tratamientos", ha puntualizado el presidente de AEF, Fernando Ramos, a Redacción Médica. Para ello, desde el Consejo General de Fisioterapeutas de España defienden que los sanitarios que representan cuentan con formación farmacológica suficiente tras el grado, en el que existen asignaturas relacionadas con este punto.

Las organizaciones consultadas han mencionado que contar con esta competencia ayudaría a mejorar la atención sanitaria, ya que se reduciría la demora en la asistencia a pacientes y por ende se aligeraría la saturación que sufre el Sistema Nacional de Salud (SNS). Asimismo, se potenciarían las capacidades de los fisioterapeutas en hospitales y centros sanitarios. "Con unos cambios, muchos profesionales dejarían de trabajar al 60 por ciento de su competencia para pasar a aportar el 100 por 100 al sistema", ha indicado Paseiro a este diario. 


Primer paso: los medicamentos sin receta médica


Según la propuesta de la alianza de colegios profesionales, lo que más apremia es regular la indicación, uso y autorización de fármacos no sujetos a receta médica. Un grupo de medicamentos entre los que se encuentran analgésicos y antipiréticos -como el paracetamol, laxantes, expectorantes mucolíticos o antihistamínicos y descongestivos. 

Paseiro ha destacado que conseguir este punto no sería complicado, ya que tan solo hay que "desarrollar la normativa". Y es que el Real Decreto 1/2015, del 24 de julio, en el que se aprueba el texto refundido de la ley de garantías y uso racional de los medicamentos y productos sanitarios, contempla en el artículo 79 que los fisioterapeutas puedan indicar, usar y autorizar, de forma autónoma, la dispensación de fármacos no sujetos a receta médica y de productos sanitarios relacionadas con el ejercicio de su profesión. Tan solo se requeriría que Sanidad promoviese la regulación necesaria para que las Comunidades Autónomas puedan acreditar a los profesionales para emitir órdenes de prescripción.


"El Real Decreto 1/2015, del 24 de julio, autoriza que los fisioterapeutas puedan indicar fármacos sin receta médica"



Creación de guías para los fármacos con receta médica


Por otro lado, las organizaciones representantes de Fisioterapia valoran la incorporación de guías que permitan la indicación de determinados medicamentos sujetos a prescripción facultativa. Sería el caso de fármacos empleados diariamente en las consultas -por ejemplo, cremas antibióticas para el suelo pélvico- y, sobre todo, ayudas ortoprotésicas, desde muletas hasta mangas de compresión. Objetos dependientes de los especialistas de Traumatología. "No tiene sentido que tengamos que acudir a un médico cada vez que queramos utilizar alguno de estos tratamientos en nuestras consultas", ha argumentado Paseiro.

En este caso, sí que habría que trabajar en guías de indicación, como ha sucedido con el caso de Enfermería. Sin embargo, las asociaciones consultadas consideran que no debería haber ningún problema con el resto de profesiones sanitarias -como sí sucede en el caso de la indicación enfermera-, ya que la propuesta va dirigida a productos muy específicos y muchos de ellos para ser utilizados durante las propias sesiones fisioterapéuticas. "No creo que haya ninguna controversia con el colectivo médico, ya no es nuestro objetivo amenazar las competencias de Medicina", ha remarcado Ramos. El presidente del órgano colegial de Fisioterapia concuerda con el número uno de AEF y tiende su mano para el diálogo con el resto de colectivos. "Estamos dispuestos a dialogar, crear mesas de trabajo y llegar a acuerdos", ha agregado.


Posibilidad de modificar las pautas farmacológicas


Asimismo, el proyecto presentado por la profesión a la ministra de Sanidad ha demandado que los fisioterapeutas puedan alterar las pautas de los fármacos que toman sus pacientes, principalmente en el caso de remitir un dolor provocado por una lesión musculo-esquelética. "Nuestra misión más que recetar es reducir. Por ejemplo, si observamos que una persona no necesita una determinada dosis de algún medicamento para mitigar su sufrimiento, ya que las técnicas físicas empleadas han funcionado bien, deberíamos tener la capacidad para limitar la toma de esta sustancia. Esto ayudaría a dar continuidad a nuestro proceso asistencial", ha afirmado Paseiro. Incluso, se consideraría su retirada en caso de interferir con los tratamientos aplicados por el profesional, algo que debería quedar perfectamente establecido en la posible expansión normativa.

Paseiro ha compartido que García escuchó atenta la propuesta. Ahora, es el turno de Sanidad, cuya máxima autoridad expuso que lo iba a estudiar y trabajar a posteriori con el organismo colegial y AEF. "Llevamos muchos años de buenas palabras en nuestro sector. Solo en las especialidades, hemos esperado más de una veintena. Ahora buscamos acciones", ha sentenciado.
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