Los investigadores han analizado la correlación de los prebióticos y los probióticos.
Los
prebióticos de la
fibra dietética y los
probióticos del
yogur son un
aliado contra el cáncer de pulmón. Concretamente, el alto consumo de yogur y de fibra ha mostrado
una reducción de más del 30 por ciento en el riesgo de padecer este tipo de cáncer, frente a las personas que no los consumen. Así lo ha puesto de manifiesto
un artículo publicado en la revista científica JAMA Oncology.
Para llevar a cabo este estudio, los investigadores se habían propuesto evaluar la
importancia y la relación entre
la fibra dietética (la principal fuente de prebióticos) y yogur (un alimento probiótico) puesto que, de por sí, ambos alimentos "confieren varios beneficios para la salud a través de la
modulación de la microbiota intestinal y las vías metabólicas". No obstante, las asociaciones con el riesgo de cáncer de pulmón "no han sido bien investigadas".
El estudio ha incluido a
627.988 hombres y 817.862 mujeres y los resultados han demostrado que "después de ajustar una amplia gama de factores de riesgo conocidos o supuestamente relacionados con el cáncer de pulmón, encontramos que tanto el consumo de fibra dietética como el de yogur se asociaron con un menor riesgo de cáncer de pulmón".
Más investigación
No obstante, pese a esta
"asociación sinérgica potencial", los investigadores reconocen que aún "se necesita más investigación para replicar estos hallazgos y desentrañar los mecanismos subyacentes".
Del mismo modo, los investigadores han explicado que no disponen de información sobre los tipos de fibra consumidos, si es
soluble o
insoluble, ni de qué alimentos procedía, es decir, si la fibra procedía de
granos, verduras o frutas. "Tampoco se disponía de datos sobre los tipos de yogur (como el contenido de azúcar y cepas bacterianas), que pueden diferir de una población a otra y confieren diferentes efectos sobre la salud", han detallado los investigadores.
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