El Hospital Vall d'Hebrón
El
Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO) ha incorporado el primer
paciente del
estudio clínico internacional del proyecto
NoCanTher. Se trata de un proyecto que tiene el objetivo de utilizar nanopartículas magnéticas para tratar el cáncer de páncreas localmente avanzado. VHIO se convierte de esta forma en el primer centro español en comenzar a aplicar esta
nueva tecnología que busca mejorar la accesibilidad de la
quimioterapia al tumor de páncreas.
“Este estudio clínico se dirige a personas con c
áncer de páncreas localmente avanzado que reciben
quimioterapia paliativa como única opción de tratamiento. Se trata de pacientes para los que existe una necesidad de
nuevas estrategias que mejoren los
resultados del tratamiento actual con quimioterapia”, explica la oncóloga médica del Hospital Universitario Vall d’Hebron e investigadora principal del Grupo de Tumores Gastrointestinales y Endocrinos del VHIO,
Teresa Macarulla, quien lidera el estudio clínico. Esta población supone un
20 por ciento del total de pacientes con cáncer de páncreas.
El estudio clínico que se pone en marcha ahora con la inclusión de este primer paciente se basa en los resultados obtenidos en la
fase preclínica del proyecto NoCanTher, donde el grupo del Cibbim- Nanomedicina Direccionamiento y Liberación Farmacológica del Vall d’Hebron Instituto de Investigación (VHIR), liderado por la especialista
Ibane Abasolo, ha tenido un papel muy notable. En el proyecto, se han desarrollado
nanopartículas magnéticas de
hierro que, al someterse a un campo magnético alterno, generan calor –hipertermia magnética. Este calor puede usarse para que las células tumorales sean más sensibles al
tratamiento estándar con quimioterapia y, por tanto, mejore su eficacia, e incluso puede
destruir directamente estas células.
Hasta ahora, el VHIR y el
Hospital de Fuenlabrada de Madrid habían comprobado la utilidad de las nanopartículas en
modelos animales, donde previamente se habían inducido
tumores de páncreas o en los que se habían implantado
tumores derivados de pacientes. En sus estudios habían demostrado que, cuando las nanopartículas se inyectan dentro del tumor directamente, la hipertermia generada reduce su volumen y, además, le provoca cambios físicos que favorecen la entrada de quimioterapia en él. “Ahora damos un paso más con la aplicación de esta nueva tecnología en pacientes y esperamos que gracias a este enfoque sea posible
mejorar sus resultados”, añade Macarulla.
La hipertermia magnética, útil para destruir células tumorales
“Creemos que con esta técnica novedosa podemos cambiar las
características del tumor y conseguir controlar la enfermedad de forma local. Se trata de una prueba piloto, un paso más para abrir
posibles opciones terapéuticas para pacientes con cáncer de páncreas localmente avanzado, a los que actualmente no podemos ofrecer alternativas más allá de la quimioterapia”, explica Macarulla.
Este enfoque basado en nanopartículas magnéticas de óxido de hierro permite aplicar
calor únicamente sobre la
zona donde se encuentran las
nanopartículas, en este caso el tumor de páncreas, sin ninguna consecuencia para los tejidos sanos que están alrededor del tumor. Mediante la hipertermia magnética se puede
transformar la energía electromagnética en calor para, junto con la administración del tratamiento estándar con quimioterapia, destruir las células tumorales y controlar de forma local el crecimiento del tumor. Para este estudio clínico se utilizará un generador de campo magnético (Generador NTT) que ha sido diseñado y construido específicamente para la generación local de energía térmica dentro del tumor.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.