La herramienta biológica Crispr, clave para potenciar la inmunoterapia contra la enfermedad.
Una investigación realizada por la Universidad de California en Los Ángeles (
UCLA) ha presentado un estudio para demostrar que los
pacientes que sufren cáncer y logran responder a los
fármacos de inmunoterapia cuentan con células inmunes capaces de ataca los tumores, antes incluso de realizar un tratamiento. El objetivo de los investigadores ha consistido en modificar los linfocitos con edición génética para que su acción se centre contra los
neoantígenos.
Un total de
once pacientes con melanoma han participado en la investigación, y
siete de ellos han respondido a la
inmunoterapia, mientras que el tratamiento
no ha sido eficaz en los otros cuatro. La clave de esta investigación radica en los
neoantigenos, proteínas de las células tumorales que el sistema inmune puede reconocer.
A través de la herramienta biológica Crispr/Cas9 se consiguió modificar el genoma, permitiendo eliminar algunos genes específicos y lograr que el sistema inmunitario se active con más efectividad contra el cáncer.
En el estudio, publicado en la revista
Nature, se aplicó Crispr para capturar
linfocitos T específicos de neoantígeno de la sangre y tumores de pacientes con melanoma metastásico, con o sin respuesta, a la inmunoterapia anti-receptor de muerte programada (
PD-1).
La acción contra los neoantígenos no es inexistente
A partir de aquí, se generaron
bibliotecas personalizadas de reactivos de captura de estos neoantígenos para lograr aislar las células T de una sola célula y clonar sus receptores, conocidos como neolinfocitos T. Después de este proceso,
múltiples células T con diferentes secuencias neoTCR reconocieron un número limitado de mutaciones en muestras de siete pacientes con respuestas clínicas de larga duración.
Las muestras de
cuatro pacientes sin respuesta al anti-PD-1 también demostraron respuestas de células T específicas de neoantígeno en la sangre y el tumor a un número restringido de mutaciones con
menor capacidad de clonación de linfocitos T y no se detectaron recurrentemente en muestras secuenciales.
Una de las principales conclusiones de la investigación es que la reconstitución de los neolinfocitos en células T de donantes a través de la edición de genes Crispr-Cas9 demostró un
reconocimiento específico y citotoxicidad para líneas celulares de melanoma compatibles con el paciente. Por otra parte, y debido a que los neoantígenos de cada paciente son distintos,
el tratamiento para lograr una respuesta de la inmuntoterapia que ser personalizado y aún no está listo para aplicarse de forma multitudinaria.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.