Andrés Cervantes, jefe del Servicio de Oncología Médica en el Hospital Universitario de Valencia.
Sostenibilidad,
equidad profesional para las mujeres y un
acceso universal de fármacos a los pacientes. Estos tres pilares formarán parte de la receta personal que busca impulsar el futuro presidente de la
Sociedad Europea de Oncología (ESMO),
Andrés Cervantes. El jefe del Servicio de Oncología Médica en el
Hospital Universitario de Valencia afirma en
Redacción Médica que “aunque la supervivencia en los pacientes con enfermedades oncológicas puede mejorar, el número de casos que se esperan tener para el
2030 globalmente es de
30 millones de personas cada año”.
Para dar las herramientas necesarias a los pacientes, Cervantes es partidario de seguir impulsando cada vez más el papel de ESMO en la toma de decisiones ligadas a las
políticas públicas sanitarias de los países europeos: “Es un hecho necesario y que ya estamos llevando a la práctica. Gracias a la influencia de ESMO se consiguió que la Unión Europea reconociese la Oncología como un
título de especialidad. ESMO tiene una relación global con la
Organización Mundial de la Salud (OMS) y colaboración directa con
asociaciones de pacientes para tener una voz compartida”.
Uno de los grandes éxitos que el futuro presidente de ESMO destaca es la
escala de magnitud del beneficio clínico publicada hace años, que ahora esperan modificar para ofrecer una herramienta a las autoridades y facilitar sus decisiones, generando
diferentes modos de reembolso de medicamentos. “Esta escala no evalúa si un medicamento es aprobado o no, sino si tiene un
efecto cuantitativamente importante. A partir de aquí se seleccionan los medicamentos con mayor beneficio sobre la población y poder facilitar su reembolso”, concreta Cervantes.
"La idea de que un medicamento vale para todos cada vez está perdiendo peso"
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Uno de los propósitos del oncólogo una vez se convierta en presidente de ESMO es
reducir los tratamientos que se conoce que fracasarán en el paciente: “Hay muchos medicamentos que se recetan cuando hay determinados biomarcadores positivos que van a tener un efecto. Esa idea de que un medicamento vale para todos cada vez está perdiendo peso. Si un medicamento se aplica solo a los que potencialmente tendrán un beneficio es una
estrategia de eficiencia. Las agencias reguladoras facilitarán que estos marcadores se empleen cuando lleguen nuevos medicamentos. Lo importante es hacer
sostenible el sistema sanitario”.
La inmunoterapia y las terapias celulares inician una nueva era
La valoración que ha realizado Cervantes en relación a esta edición de ESMO, celebrada en París, es “tremendamente positiva” y se basa en dos aspectos que cambiarán radicalmente el papel de la Oncología a nivel mundial: “Es un hecho de que la
inmunoterapia cuando antes se aplica en el curso natural de la enfermedad es mejor. Antes se administraba para los pacientes cuando la
quimioterapia fracasaba. Ahora su empleo temprano llega a conseguir, por ejemplo, la desaparición de tumores locales en
cáncer de colon en más del 60 por ciento de los casos. El desarrollo de
terapias celulares al principio parecía limitadas a tumores como
leucemias o
linfomas, y ahora está ganando un gran protagonismo en Oncología. Con estos dos hitos, las terapias contra el cáncer se están recolocando”.
Europa se vuelca contra el cáncer
El plan europeo contra el cáncer ya está implantado y Cervantes espera que se conozcan los
primeros resultados de su impacto en el año 2030: “Los proyectos ofrecidos por la Unión Europea requieren que haya al menos
cinco países miembros que participen en este plan. En algunas convocatorias es obligatorio que algunos
países de más baja renta participen, ya que son los que más se beneficiarán de sus resultados. Ya hay convocatorias y se han cerrado proyectos, algunos de ellos empiezan el mes de
enero. Se espera que todas estas acciones causen un impacto en la mortalidad, gracias a la aparición de nuevas tecnologías y al respaldo del mundo académico y sanitario”.
"Existen proyectos cerrados contra el cáncer y algunos empiezan este mes de enero"
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Cervantes quiso dar un paso adelante al presentarse a la presidencia de ESMO, ya que considera que “es una manera de
servir a la sociedad y estamos en un momento de mucho interés. La ciencia está trayendo una gran cantidad de beneficios a los pacientes y, en el fondo, lo que importa es ayudar a la gente. Debemos seguir impulsando estrategias de prevención y diagnóstico temprano para estar preparados de cara al futuro”.
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