El presidente de SEOR señala la obsolescencia tecnológica como el principal reto de la Oncología Radioterápica

"Uno de cada cuatro pacientes que necesita radioterapia no la recibe"
Carlos Ferrer, presidente de SEOR.


5 feb. 2019 9:20H
SE LEE EN 6 minutos
El aumento de la incidencia del cáncer en los próximos años y las jubilaciones de los médicos crearán una ‘tormenta perfecta’ en la Oncología Radioterápica, señala el presidente de la sociedad que reúne a estos profesionales (SEOR), Carlos Ferrer Albiach.

A ello se le une que, en la actualidad, hay una cuarta parte de pacientes que no pueden acceder en condiciones a tratamientos radioterápicos, advierte el también director del Instituto Oncológico del Consorcio Hospitalario Provincial de Castellón.

¿Cuántos pacientes de cáncer reciben tratamientos radioterápicos en España?

La evidencia que tenemos es que uno de cada cuatro pacientes que lo necesitan se quedan sin recibirlos. Esto se debe a que, todavía, no está cerrado el mapa sanitario de la Oncología Radioterápica.

Ésta es una especialidad que requiere un equipamiento determinado y todavía hay núcleos de población que distan más de una hora, hora y media, de desplazamiento para recibir el tratamiento, y eso hace que en estas áreas haya muchos pacientes que no se recurra a radioterapia en su tratamiento.

La mayoría son pacientes de tratamiento paliativo, que podrían mejorar su dolor, su sintomatología, con este tipo de terapia, pero otros son pacientes mayores que, en ocasiones, se les priva de un tratamiento efectivo y –sobre todo en aquellos en los que la cirugía no es tolerable– puede ser un abordaje curativo.


"Hay alrededor de 110 centros que ofrecen tratamiento radioterápico en España"


Los recursos no están bien distribuidos y, además, no ha habido reposición de equipamientos durante muchos años.

¿Con qué se suele sustituir el tratamiento radioterápico?

Depende. Para un problema de dolor, se sustituye por mórficos u otro tipo de fármacos. También se sustituyen por quimioterapia. Son todos tratamientos oncológicos, pero cada uno tiene la indicación y en un momento oportuno. No se puede sustituir lo uno por lo otro en tanto en cuanto cada uno tiene sus indicaciones.

¿Cuántos centros pueden ofrecer tratamiento radioterápico en España?

En este momento, hay alrededor de 110 centros que ofrecen tratamiento, y lo idóneo sería que se expandieran en algunas áreas. Por ejemplo, hay un proyecto interesante en Castilla y León para, dependiendo del Hospital de Salamanca, montar centros satélites en Zamora y en Ávila.

La Oncología Radioterápica es una especialidad de enorme complejidad y subespecialización. Entonces, un centro dotado de un solo equipo y de un par de médicos, ni puede ofrecer todas las técnicas, ni los profesionales pueden estar al día del tratamiento de todos los tumores.

La idea es montar centros principales y centros satélites en los que, bajo la cobertura del centro principal (en el que hay subespecialistas en todos los diferentes tipos de tumores), se diseñan las estrategias terapéuticas de los centros satélites para que reciban la mejor atención y la más individualizada.

Hemos hablado de equipos de radioterapia, pero ¿qué hay de los especialistas? ¿Son suficientes en el SNS?

Este es un tema muy candente. Estuve la semana pasada en una reunión en Bruselas, en el Parlamento Europeo, en la que se manejaron cifras de un aumento mínimo del 15 por ciento de la incidencia del cáncer para 2025, debido al envejecimiento poblacional o los cambios en los estilos de vida.


"Estamos barajando que harán falta casi 400 oncólogos radioterápicos a partir de 2025"


En cuatro o cinco años se espera un aumento de jubilaciones entre el personal que está trabajando en la Medicina pública. Por ello, estamos barajando que harán falta casi 400 oncólogos radioterápicos a partir de 2025 para suplir el aumento de la incidencia del cáncer y las jubilaciones.

Hemos estudiado este tema a fondo, y en poco tiempo pasaremos un informe al Ministerio de Sanidad para que sea consciente de las necesidades a las que nos vamos a enfrentar en un futuro.

Hemos hecho un censo de los especialistas españoles y nos dan estas cifras. Esto requerirá tomar decisiones en cuanto a las plazas MIR: probablemente habrá que dotar más plazas, habrá especialidades que tendrán menos requerimientos y a lo mejor se puedan derivar plazas de una especialidad a otra… Pero hay que tomar medidas ahora que estamos a tiempo.

¿Qué innovaciones han sido importantes en los últimos tiempos y se pueden incorporar en el corto-medio plazo?

Un aspecto muy interesante y que se está empezando a desarrollar es el de la combinación de la inmunoterapia con las radiaciones. Los tumores consiguen vencen al sistema inmune porque éste no los reconoce como extraños, los fármacos nuevos consiguen vencer estas barreras.

Estos fármacos, cuando se combinan con radiación, destruyen las células tumorales y esos detritus se convierten en anticuerpos fácilmente reconocibles por el sistema inmune, que además está potenciado por la inmunoterapia.


"En un plazo no mayor a dos años tendremos resultados sobre la combinación de inmunoterapia y radioterapia"


Esta es una herramienta muy interesante en la que se está trabajando en muchos ensayos para potenciar el efecto de ambas cosas. Está pasando con la inmunoterapia lo mismo que con la quimioterapia, que se están utilizando conjuntamente en muchos tumores: cuello, pulmón, etc.

Todavía no hay estándares en primera línea, se están probando en ensayos con resultados muy protemedores y prácticamente en todos los tipos de tumores: pulmón, mama, melanoma… Hay muchos ensayos abiertos y en un plazo de no más de dos años tendremos resultados porque los preliminares están siendo muy prometedores.

¿Cuál es el principal reto de la Oncología Radioterápica en España?

Uno de los principales problemas que tenemos es que las administraciones no son capaces de reconocer la obsolescencia tecnológica. Está determinado en Europa que, a partir de los 12 años, se debe de cambiar los equipos porque el grado de obsolescencia puede llegar a causar riesgos que, de acuerdo al estado del arte, no debería ser así.

En España existe un control para la circulación y seguridad de los coches, pero no para los equipos médicos. Sería una buena apuesta de futuro –y no solo hablo de los equipos de radioterapia– no la compra sino el renting, de manera que, al pagar un alquiler por el equipo, la empresa adjudicataria los mantuviera actualizados.

A estos retos que representan el avance tecnológico se plantean soluciones inteligentes y adecuadas. La compra de equipos da lugar a problemas de obsolescencia: esos equipos son difíciles de mantenerlos actualizados. Este reto deberíamos plantearnos resolverlo para los próximos años.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.