Rafael López, jefe del Servicio de Oncología del Hospital Clínico de Santiago de Compostela.
Según
Rafael López, el avance más importante en cáncer se ha producido en el conocimiento de su biología. El jefe del
Servicio de Oncología del
Hospital Clínico de Santiago de Compostela ha comentado en el
Foro Oncológico organizado por
Sanitaria 2000, con la colaboración de
Novartis, que los médicos también han cambiado: “Antes utilizábamos la compasión y ahora estamos pegados a la información”.
El encuentro se ha centrado en
cáncer de mama –“el tumor maligno más frecuente en mujeres, que representa el 28 por ciento de todos los cánceres”, ha recordado López– y, en concreto, en su forma
metastásica: “El talón de Aquiles del cáncer es la metástasis”, ha declarado el oncólogo. La gran complejidad en este tipo de tumores es su “evolución,
proliferación y heterogeneidad”.
Rafael López indica cuál es el desafío en cáncer de mama metastásico.
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“Hemos mejorado mucho en
tratamiento local –el 86 por ciento de las mujeres se cura con las terapias actuales–, pero en el abordaje de la enfermedad metastásica hemos avanzado relativamente poco y la gran mayoría de las mujeres sigue falleciendo”, ha indicado López. El especialista ha detallado que “las metástasis son más frecuentes en huesos, hígado, pulmones y cabeza, pero pueden estar en
cualquier parte del organismo”.
El jefe de Oncología del Clínico ha señalado que el reto en cáncer de mama metastásico es identificar sus características moleculares para tratarlo de una forma lógica: “Ya conocemos muchas
vías moleculares por las que el cáncer crece, se diferencia o sobrevive. Tenemos cerca de
400 nuevas moléculas en fase de investigación y que van a ser capaces de bloquear alguna o varias de esas vías. Identificarlas y elegir el fármaco más efectivo es el desafío de la investigación del futuro”.
Nuevo paradigma en el tratamiento
Según López, “el coste de estos nuevos tratamientos es motivo de preocupación porque son caros y ponen en peligro la
sostenibilidad del sistema”. Por ello, ha propuesto “
pagar por el valor: la ecuación entre los resultados y el coste en conseguirlos”. El oncólogo ha explicado que esto significa que hay que
medir los resultados: “El tratamiento sistémico es solo el siete por ciento del coste del cáncer de mama metastásico; hay que medir desde la prevención primaria hasta la reinserción de la paciente”.
“Los
resultados importantes para las pacientes son la supervivencia, el grado de salud y recuperación, la sostenibilidad y recuperación de las recurrencias, y las consecuencias a largo plazo del tratamiento. Para ello, hay que organizar la atención sanitaria por
unidades prácticas funcionales multidisciplinares”, ha concluido López.
El jefe del Servicio de Oncología del Hospital Clínico de Santiago de Compostela ha ofrecido la visión del oncólogo en el Foro Oncológico de Sanitaria 2000.
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