El gesto de Enfermería con un paciente oncológico: "Bailamos la Macarena"

Sara López, que trabaja como enfermera en el Servicio de Oncología, ha contado el día en el que se le ocurrió, junto al resto del equipo de Enfermería, bailar la canción de la Macarena junto a un paciente con un cuadro clínico grave para sacarle una sonrisa y alegrarle su día. "Casi se pone a llorar el hombre", ha contado la sanitaria.

A través de TikTok, López ha contado los detalles de ese momento emotivo, que le ha ha servido para tener más claro aún que ser enfermera es lo suyo y es la profesión que le hace feliz a pesar de que hay momentos duros en la unidad en la que trabaja.

Convencida de que Enfermería es su trabajo ideal

"Me sucedió algo que me reafirmó que estoy en la profesión indicada, estoy donde quiero estar, soy lo que quería ser de pequeñita. Tengo claro que no hay otra profesión que me pegue más. Es como anillo al dedo", ha comenzado la enfermera del Servicio de Oncología.

En esta línea, la sanitaria ha confesado que ella y la vida de enfermera son "un pack que el uno sin el otro no podrían vivir". "Yo trabajo en un hospital oncológico. Los pacientes que yo recibo y los que atiendo tienen cáncer, obviamente, como su propio nombre indica, y es un servicio muy, pero que muy duro. No os voy a engañar".

López ha explicado que el servicio en el que trabaja es impredecible debido a que la enfermedad que padecen los pacientes es grave, dura y, en muchos casos, con pronósticos poco esperanzadores. "Es jodido ver cómo personas están al borde de la muerte, están pasando por una situación muy mala, están muy enfermos, no tienen ganas de seguir adelante. Obviamente, hay muchos perfiles de pacientes, pero la gran mayoría están devastados porque no saben qué más hacer, no saben qué les pasará mañana, porque el cáncer es bastante impredecible".

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Un momento emotivo con la Macarena y un paciente

Sin embargo, a pesar de esto, hay momentos emotivos que quedan guardados para siempre en la memoria de la enfermera y que le llevan al convencimiento de que está en el lugar correcto. "Me pasó algo muy bonito. Es que por eso soy enfermera, por eso soy lo que soy. O sea, obviamente, porque me encanta ayudar a los demás. Soy súper empática y doy todo lo que tengo".

"Teníamos un paciente súper, súper, súper malito. El paciente lleva una traqueostomía, una sonda nasogástrica, no puede hablar, no tiene la capacidad de fonación adecuada, o sea, habla a través de una tablet. Está, pues, en estado bastante crítico y se nos ocurrió que, para alegrarlo, íbamos a bailarle la Macarena", ha contado la sanitaria.

Las dos enfermeras y las dos TCAE que se encontraban en turno en ese momento pusieron la canción y la bailaron con el paciente. "Le sacamos una sonrisa, casi se pone a llorar el hombre, y solo por ver ese rayito de esperanza en su cara, después de haberlo pasado tan mal, dije, me cago en la leche, Sara. ¡Qué feliz eres! ¡Qué feliz eres viendo a otras personas felices! Luego, obviamente, los agradecimientos de familiares, de los propios enfermos, te llenan el corazón".

Para Sara, el hecho de sacar una sonrisa a pacientes que tienen un pronóstico grave y recibir el cariño tanto de las personas que están ingresadas como de sus familiares le hacen sentir muy bien y compensan los momentos complicados a los que tiene que enfrentarse en el Servicio de Oncología.