El Centro Nacional de Neurotecnología creará nuevas terapias y diagnósticos

El Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades ha publicado este miércoles en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el convenio al que se ha llegado junto con la Comunidad de Madrid y la Universidad Autónoma de Madrid para la creación del Consorcio Centro Nacional de Neurotecnología. Esta nueva institución tendrá como misión principal promover la integración de la neurociencia y las tecnologías digitales.

A través de este consorcio establecido, las tres instituciones pretenden impulsar la creación y consolidación de una comunidad con escasa presencia en España, donde campos como la neurociencia y las tecnologías digitales pueda permitir el desarrollo de herramientas tecnológicas que estén basadas en los fundamentos del cerebro humano y se pongan al servicio de la salud y de la lucha contra determinadas patologías clínicas en esta área clínica.

Dentro de este escenario se destacan las enfermedades crónicas en estados iniciales, trastornos del neurodesarrollo incluyendo enfermedades del espectro autista, así como Parkinson, Alzheimer, depresión, trastornos del sueño o patologías del ritmo circadiano, y demás casos tras daño cerebral agudo y adquirido. Además de los aspectos científicos y tecnológicos, esta comunidad se ocupará de cuestiones éticas y jurídicas en el ámbito de las neurotecnologías.

Otra de las metas que se pretende potenciar con la confección de este convenio es la transferencia de los resultados de investigación y la creación de empleo en la mayor medida posible, especialmente en el ámbito nacional. Además, la constitución del Centro Nacional de Neurotecnología permitirá materializar los intereses perseguidos por diferentes Administraciones Públicas en el ámbito de sus competencias, al potenciarse la excelencia en la investigación en neurociencia y tecnologías digitales, de la que podrán participar grupos, centros e investigadores de diferente procedencia.

Aportaciones económicas para el consorcio

La aportación económica del conjunto de las partes que integran el Consorcio se eleva a 200 millones de euros, de los cuales 120 millones los aporta la Administración General del Estado, 78 millones de euros corresponden a la Comunidad de Madrid y 2 millones de euros a la Universidad Autónoma de Madrid.

En materia económica, el convenio también certifica que las aportaciones de las partes se extenderán a lo largo de un periodo de catorce años (2024-2037), transcurrido el cual se ha establecido que el Consorcio podrá autofinanciarse sin necesidad, por tanto, de nuevas aportaciones de las partes.

Por lo que respecta a las participaciones en el consorcio creado, la Administración General del Estado con una participación del 60 por ciento, la Comunidad de Madrid con una participación del 39 por ciento y, finalmente, la Universidad Autónoma de Madrid tiene una participación del 1 por ciento.

Un mayor conocimiento del cerebro humano

Finalmente, los principales fines del consorcio serán avanzar en nuestro conocimiento del cerebro humano, desarrollar nuevos métodos diagnósticos y terapias para enfermedades del sistema nervioso y crear valor, fomentando un ecosistema de innovación, a través de un sistema de creación de empresas emergentes en el ámbito que constituye el objeto del Consorcio. Por último, se pretende propuestas normativas y nuevas reglas éticas necesarias para la aplicación de las nuevas tecnologías a la sociedad, diseminando e incorporando a la sociedad sus actividades científicas y formando nuevas generaciones de líderes en neurotecnología.