Pilar Aparicio, directora general de Salud Pública del Ministerio de Sanidad.
El
Ministerio de Sanidad mantiene su postura de no incluir el
Bexsero en el calendario vacunal nacional, como ya
adelantó Redacción Médica. Así se muestra en la documentación a la que ha tenido acceso este medio y que ha sido remitida a las comunidades autónomas para la próxima
Comisión Delegada y el
Consejo Interterritorial que se celebrarán la semana próxima. Sin embargo, sí admiten que su
postura es contraria a la de los
pediatras, que se muestran partidarios de la inclusión.
El Ministerio alude que la Ponendcia de Vacunas aprobó en 2013 el documento 'Vacuna frente a enfermedad meningocócica invasora por serogrupo B y su posible utilización en salud pública' en el que se concluía que, con la información disponible y la situación epidemilógica, no se consideraba justificada la
inclusión de la vacuna 4CMenB (más conocida como Bexsero) en el calendario sistemático de vacunaciones, que había sido autorizada meses antes por la
Comisión Europea.
En abril de 2014, la Comisión de Salud Pública (CSP) aprobó las recomendaciones de utilización de la vacuna 4CMenB en personas de alto riesgo de padecer EMI y a casos y contactos en brotes. En junio de 2015 se modificaron estas recomendaciones y se
aconseja la vacunación de las personas que hubieran sufrido algún brote de EMI, independientemente del estado previo de vacunación y en el caso de los contactos estrechos de un caso de EMI si además eran personas de riesgo.
En el documento 'Vacunación en grupos de riesgo en todas las edades y en determinadas situaciones' aprobado por la CSP en julio de 2018, el texto recoge que se recomienda la vacunación frente a EMI, además de a los grupos ya especificados, a las personas con
déficit de complemento y en personas que hayan sufrido trasplante de
progenitores hematopoyéticos.
Discrepancia de la AEP
"A pesar de estas recomendaciones, desde el Comité asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría (AEP) se recomienda la vacunación sistemática con MenB para
todos los niños a partir de dos meses de edad y especialmente a los más pequeños", reconocen.
Pero el Miniseterio se mantiene. "A pesar de llevar comercializada varios años y en uso sistemático en lactantes de varios países,
solamente el Reino Unido ha publicado datos postcomercialización que abarcan los tres primeros años desde su inclusión sistemática en población infantil", aseguran en sus conclusiones.
Y añaden que: "Los datos disponibles en Inglaterra sugieren un impacto positivo de la vacunación
a partir de la semana 18 de vida y una
enfermedad menos grave en vacunados. Sin embargo, después de estos tres años
no se han publicado datos concluyentes de
efectividad que abarquen todo el periodo. Debido a las diferencias en la expresión de las lipoproteínas de los aislamientos de MenB según las zonas geográficas,
no es sencillo cuantificar cual podría ser el impacto o la efectividad de la vacuna en nuestro medio".
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