La ministra de Sanidad, Mónica García; y Javier Padilla, secretario de Estado del ramo.
El
Ministerio de Sanidad trasladará esta semana a la
Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial el
Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo, que, entre otras medidas, contempla convertir terrazas y playas en espacios
‘sin humo’. Incluido el de los
vapeadores, a los que el departamento que dirige Mónica García ha situado en el foco del debate: “Son una puerta de entrada en jóvenes a formas más lesivas de tabaquismo”, ha señalado
Javier Padilla, secretario de Estado de Sanidad.
El mandatario progresista ha avanzado este domingo las intenciones del Ministerio de presentar “muy pronto” el plan anti-tabaco en el pleno del
Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, de forma que “pueda echar a andar con sus diferentes medidas para
mejorar la salud de la población”.
Padilla se ha referido al caso concreto de los vapeadores, que, ha advertido, se suelen presentar “como un
elemento de reducción de daños”. “Los nuevos productos de tabaco son una
puerta de entrada en jóvenes a formas más lesivas de tabaquismo, generando la adicción y el enganche físico, psíquico y comportamental”, ha señalado el secretario de Estado de Sanidad, que ha subrayado que “si fueran elementos de reducción de daños”, los vapeadores “se podrían regular como productos sanitarios (si tuvieran la evidencia probada) y limitar su
dispensación bajo prescripción”.
“Pero claro, no es eso lo que se reclama desde el lobby, que defiende un libre uso que refuerza el rol de
pasarela de entrada para la población más expuesta a día de hoy: los jóvenes”, ha puntualizado.
Rescate del plan anti-tabaco de 2021
El propio Padilla ha recordado su reciente reunión con miembros de la
Asociación Española contra el Cáncer, a los que transmitió su intención de llevar el
Plan Integral de Prevención y Control de Tabaquismo a la próxima sesión de la Comisión de Salud Pública del CISNS.
El pasado diciembre, Sanidad avanzó su intención de rescatar esta estrategia que comenzó a esbozarse en 2021 pero que no llegó a cristalizar. Entre otros objetivos busca
reducir hasta en un 30 por ciento el consumo de tabaco en España con el horizonte puesto en 2025, algo que se pretende conseguir poniendo más zanjas a este tipo de productos.
"Debemos retomarlo porque no podemos darle la espalda a la única medida que más años de vida y más calidad de vida puede aportar a la población, que es disminuir el tabaquismo", declaró entonces la ministra del ramo,
Mónica García.
Dicho plan se concibió como el paraguas bajo el que el
Ministerio de Sanidad pretendía endurecer la ley 28/2005 y su pionera actualización de 2010, basada en dos cuestiones: la ampliación de espacios sin humo a lugares como
coches en presencia de menores y
embarazadas, playas o terrazas y afrontar los nuevos desafíos que suponen los nuevos productos del tabaco y relacionados.
Presumiblemente, este plan afectará a lo vapeadores, que tendrán que tener una
"regulación precisa" y adaptada a la normativa del tabaco. "Lo que prevemos es estudiar cuál va a ser ese plan, si hay que ampliarlo, si hay que modificarlo, pero sí que tenemos un firme compromiso con esas recomendaciones", concluyó la ministra.
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