Juan Fernando Muñoz, secretario general de Salud Digital, Información e Innovación del SNS.
El Ministerio de Sanidad trabaja para una mayor integración de los servicios autonómicos en el
Sistema Nacional de Salud (SNS), de forma que se fomente la
interoperabilidad a nivel estatal. El objetivo es desarrollar aplicaciones ‘core’ que, a través de un nodo central, faciliten la anexión de las administraciones sanitarias regionales. En este escenario, el departamento que ahora dirige
Mónica García ha anunciado ya su decisión de licitar los servicios tecnológicos para dar soporte a las comunidades y facilitar su integración en los sistemas de información sanitarios del Ministerio.
La Plataforma de Contratación del Sector Público recoge los pliegos de condiciones para la contratación de estos
servicios de integración de los sistemas de información sanitaria del SNS, para los que el Ministerio reserva una partida económica cerca a los
400.000 euros.
Tal y como detalla Sanidad en el pliego de condiciones, la Dirección General de Salud Digital y Sistemas de Información del SNS tiene entre sus funciones el impulso de
nuevas tecnologías, de la mano de las consejerías regionales y organismos internacionales, para reforzar la
política de interoperabilidad en el sistema sanitario.
“En este marco de impulso al uso de las tecnologías de la información e interoperabilidad entre los diferentes actores que forman parte del SNS surge la necesidad de disponer de recursos suficientes para poder proveer de un
servicio ágil y de calidad a la hora de facilitar la
integración a todas aquellas comunidades autónomas que deseen interoperar con algún sistema de información sanitario”, subraya.
Refuerzo del nodo central de integración sanitaria
Añade el departamento de
Mónica García que las transferencias sanitarias a las comunidades autónomas “condujeron al Ministerio a un nuevo rol en el que la tecnología era una clave importante para permitir la
coordinación e integración de estas en el sistema nacional de salud y sus diferentes sistemas de información”. A fin de dar respuesta a estas se necesidades se creó el llamado nodo central del SNS.
El pasado enero, el Gobierno ya formalizó la
contratación de cinco servicios para el refuerzo de este nodo central, una infraestructura que facilita el intercambio de información entre el Ministerio de Sanidad, las comunidades autónomas y el resto de agentes implicados en la gestión sanitaria para impulsar la interoperabilidad en el SNS y la verificación de medicamentos.
A lo largo de los últimos años se han desarrollado además diversas
aplicaciones ‘core’ que facilitan la integración de los servicios de salud de las comunidades autónomas a través del nodo central, así como otro conjunto de aplicativos que apoyan el funcionamiento del SNS. Todos ellos están en constante evolución, tanto desde el punto de vista funcional como tecnológico.
Receta Electrónica Interoperable
Una de aplicaciones ‘core’ que facilitan la integración de los servicios de salud de las comunidades autónomas a través del nodo central es la aplicación de
Receta Electrónica Interoperable del SNS (RESNS), que tiene como principal objetivo permitir la dispensación de una receta a un paciente en una región diferente a la de prescripción.
“Para ello es necesario intercomunicar los sistemas de
receta electrónica de las CCAA utilizando como nexo de unión el nodo central del Ministerio —detalla Sanidad—. Las comunidades, desde sus nodos, solicitan recetas médicas prescritas a pacientes concretos a otras CCAA que las tengan disponibles”.
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