Crece un 15% la presencialidad en Primaria, que gana puntos en satisfacción

Casi ocho de cada diez de las consultas de cabecera realizadas en España a lo largo del último año fueron presenciales. Se trata de un 15 por ciento más que hace un año, según los datos del Barómetro Sanitario de 2023, que constata una ligera mejora de la percepción ciudadana sobre la Atención Primaria y el conjunto del sistema sanitario tras tocar fondo en 2022.

En concreto, el Barómetro Sanitario de 2023 del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) refleja que la satisfacción de la población general hacia el sistema sanitario público es de 6,27 puntos, lo que supone un incremento mínimo (de 0,1 puntos) pero significativo dada la tendencia a la desafección que ha caracterizado a los últimos años, especialmente tras la irrupción de la pandemia del Covid-19.

Según este informe, el 56,7 por ciento de la población opina que el sistema sanitario de España, en general, funciona “bastante bien” o “bien”, aunque matiza que son necesarios algunos cambios. En 2019 este índice era del 71,4 por ciento y cayó hasta el 57,1 por ciento en 2022. “Se observa ahora cierta estabilización en este indicador”, apunta el Ministerio de Sanidad.

Mejor percepción de la Atención Primaria

En la ‘joya de la Corona’ del Sistema Nacional de Salud (SNS), la Atención Primaria, la ciudadanía valoró con 6,37 puntos los servicios recibidos en las consultas médicas frente a los 6,23 de hace un año.

El estudio revela que tres cuartas partes de la población de 18 y más años ha acudido a este nivel asistencial durante el último año. Para el 78,6 por ciento la atención fue presencial, frente al 66,9 por ciento de 2022. Por el contrario, las consultas telefónicas cayeron del 31,3 al 19,9 por ciento).

Dos de cada diez pacientes (21,1 por ciento) fueron atendidos en el día o al día siguiente, y el 69,8 por ciento refirió que pasó más de una jornada porque no había cita antes. Otro 5,3 por ciento indicó que pasó más de un día porque le interesaba o le venía mejor.

Las personas que tuvieron que esperar más de un día porque no había cita disponible, tuvieron una demora media de 9,12 días para ser vistos.

Sobre cómo les está afectando la situación de la Atención Primaria en España, el 22,1 por ciento refiere que les está afectando “mucho o bastante” frente al 21,9 por ciento que piensa que “algo” y el 53 por ciento que afirma que “nada o casi nada”.

En su conjunto, hasta el 81,4 por ciento de las personas que han utilizado los servicios de Primaria “manifiestan estar satisfechas con la atención recibida, aumentando ligeramente respecto a 2022” (79,7 por ciento), según el Barómetro de Sanidad.

Respecto a la necesidad de aplicar determinadas medidas en el ámbito de la Atención Primaria, se señalan como las más importantes que las personas mantengan al mismo médico de Familia de forma estable si están satisfechas (9,2); aumentar las plantillas de personal sanitario (9,1); y dedicar más recursos económicos (9). Otras medidas, como aumentar el tiempo de consultas o mejorar las instalaciones y medios tecnológicos, se sitúan en torno a 8 puntos.

Cuatro de cada diez ciudadanos han ido a Urgencias

En lo relativo a las Urgencias, el 39 por ciento de las personas encuestadas refiere haber acudido a este servicio de la sanidad pública en el último año. Un 12 por ciento manifiesta haber acudido cinco o más veces en este periodo.

Los dispositivos de urgencia de la Atención Primaria recibieron aproximadamente el 44,4 por ciento de la demanda de atención urgente, y los hospitalarios el 49,7 por ciento.

De forma paralela, el Barómetro Sanitario de 2023 revela que casi la mitad de la población (el 47,8 por ciento) fue a la consulta de un especialista del segundo nivel asistencial de la sanidad pública en los últimos 12 meses y que el 82,8 por ciento valoró positivamente la atención recibida.

Otro 9,1 por ciento refirió haber estado ingresado en un hospital público. Cuatro de cada diez lo hicieron de manera programada para una cirugía o prueba diagnóstica; el 54,1 por ciento ingresó por una enfermedad o problema de salud; y el 4,5 por ciento por un parto.