No poder ejercer en la España con más déficit médico: "No sé ser camarera"

La frustración, la molestia y la tristeza son los sentimientos que acompañan a los numerosos médicos extracomunitarios que residen en España y que no pueden ejercer su profesión a pesar de haber solicitado la homologación de sus títulos hace años, sin respuesta, y con la indignación ante el reclamo de la falta de médicos del país: “nosotros somos médicos y no nos dejan trabajar”.

El malestar ante la lenta homologación de sus títulos aumenta, además, al ver que muchos otros médicos están viendo resuelto este trámite a pesar de haberlo solicitado hace pocos meses gracias al nuevo decreto de homologación y convalidación de títulos de Medicina, Enfermería y otras formaciones sanitarias. “Hay gente que lleva esperando dos años por el viejo decreto y ahora, tras la aprobación del nuevo, algunas personas ya tienen su homologación tras tres meses”.

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Mariana: "Es como si estás en una cola y tu número es el 300 de 1.000 y, de repente, se abre una ventanilla y la cola empieza de atrás hacia delante"

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Mariana es de Argentina, pero vive en Barcelona desde hace un año. Es pediatra y especialista en neonatología, y cuenta con 15 años de experiencia a sus espaldas. Comenzó con la formalización para homologar su título en diciembre de 2021 y al año siguiente decidió establecerse en España. “Como la ley decía que los trámites de la homologación se resolvían en seis meses, me establecí en mayo. Cuando llegué me puse en contacto con otros médicos extranjeros que estaban en mi misma situación y ahí nos llevamos la gran sorpresa del atraso con las homologaciones”.

Mariana explica que en ese momento comenzó a enviar correos electrónicos a las distintas instituciones para consultar el estado de esta cuestión. “Las respuestas fueron malísimas, solo nos decían que teníamos que esperar, que estaban muy demorados”.

El malestar de todos estos profesionales aumentó con la llegada del nuevo decreto de homologación de títulos de Medicina en noviembre, que perseguía simplificar estos trámites. Y no es que la incorporación de esta nueva medida no funcionase, que lo hizo; es que funcionó, pero dejó atrás a miles de profesionales que llevaban años esperando por su homologación y agilizó la resolución de aquellos trámites abiertos a partir de esa fecha.

“Estamos viendo como están saliendo las peticiones del nuevo decreto, y los del viejo, que llevamos así años, seguimos esperando”, explica Mariana. “Estas cosas generan una gran molestia, lo lógico sería adelantar a los que llevamos tanto tiempo”.

La lentitud en las tramitaciones la han obligado a buscar otro empleo y ha trabajado como teleoperadora durante cinco meses e incluso se ha llegado a plantear viajar a otros países como Francia o Alemania con la idea de ejercer como médica sin tanta demora.

“Hace un año y siete meses que no ejerzo”, explica. “La medicina para un médico es su vida, es mi vocación, extraño a los compañeros, estar en actividad hace que me sienta útil, podría estar salvando vidas y siento que estoy atada de manos”.

“Treinta años de experiencia guardados en una vasija”

Rubén es especialista en Cirugía General y Medicina del Trabajo, una carrera que lleva ejerciendo desde 1989 y que se ha visto con la obligación de pausar por el mismo motivo de Mariana. Como ella, es Argentino y vino a España en octubre de 2021, tras haber comenzado con los trámites de homologación en abril de ese mismo año.

“Yo era un cirujano prestigioso, con una carrera de más de 30 años de muchísimo trabajo, pero un día uno tiene que cambiar esa cantidad por calidad, sobre todo de vida”, comenta Rubén.

Actualmente trabaja en una clínica como asesor mientras espera por la homologación de su título para poder ejercer. Para él, la sorpresa también llego cuando se aprobó último decreto y que permitió a las personas que presentaron sus papeles en noviembre resolver este trámite. “Entonces nos encontramos que la gente que llevábamos dos años esperando no teníamos ninguna solución ni ningún tipo de respuesta”.

“Nos sentimos los últimos”, comenta. “España no nos tiene que formar, solo estamos esperando para poder empezar a trabajar”, reclama Rubén. “Cuando uno escucha y lee en todos los lados los graves problemas que tiene España, que la gente espera muchísimo por un turno médico, y que hay guardias sin cobertura, no entiende que haya miles de médicos que están esperando a que un funcionario se digne a ver su expediente”.

“Sientes que te están tomando en broma, y no, no es que haya falta de médicos, es que sí hay médicos y no nos autorizan a trabajar”, declara Rubén.

“¿Cómo puede ser que falten médicos y no pueda trabajar?"

Ana Laura está en la misma situación que Mariana y que Rubén. Su trámite lleva en marcha más de dos años y en marzo viajó a Madrid con la esperanza de poder solucionarlo en persona. “Fui, tuve una reunión, me dijeron que me responderían en 15 días hábiles y todavía no he recibido nada”.

Con una carrera de seis años como ginecóloga y obstetra en Argentina, Ana Laura decidió emigrar a España en búsqueda de una mejor calidad de vida que se resiste entre unas tramas burocráticas que parecen no avanzar. “Es un proceso demasiado lento, si hay algún reclamo me van a pedir cosas que ya están vencidas y después me lo rechazarán porque hace años que no ejerzo, cuando la realidad es que no lo hago porque no me lo permiten”.

“Hay un montón de trabajo y se necesitan médicos, y aquí estamos muchos que no podemos ejercer”, explica, algo que le produce “mucha angustia”: “Yo estoy disponible y sin la homologación no me aceptan una entrevista, a su vez esto no me permite tener contratos para alquileres y así una cadena de cosas”.

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Ana Laura: "Estoy intentando trabajar en cualquier cosa: negocios, hostelería; pero no soy camarera, no sé ser camarera, yo soy médica"

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Para ella, lo más “injusto” es que se estén resolviendo “los pedidos anteriores” y, al igual que sus compañeros, no entiende que los que llevan “años esperando” no obtengan respuesta de las instituciones.

Su consejo para otros médicos extracomunitarios que planeen vivir en España es que inicien los trámites cuanto antes, que lo hagan “apenas tengan el título, aunque no sepan si van a venir”, ya que el proceso es “tan lento” que, si en un futuro toman esa decisión, con suerte, su expediente ya estará resuelto.

Mariana, Rubén y Ana Laura son tres nombres de una larga lista de médicos que residen en España y que esperan por la resolución de sus títulos desde hace años en un sistema que les ha olvidado y que, lejos de valorar lo que pueden aportar a la sanidad, no ha hecho más que poner trabas burocráticas en su camino.