Las nuevas facultades pueden mermar la calidad de las existentes.
20 mar. 2017 11:50H
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Los tres decanos de las facultades de Medicina de la Universitat de València, la Universitat Miguel Hernández de Elche y la Universitat Jaume I de Castellón, aúnan fuerzas para pedir que no se abran nuevas facultades en la comunidad. Así lo expresan Federico Pallardó, Antonio Compañ y Rafael Ballester, que este martes participarán en la mesa redonda "Apertura de nuevas facultades de Medicina. ¿Y nosotros?", que organiza la Delegació D´Alumnes de Medicina.
"Reclamamos una planificación que frene el crecimiento en el número de facultades. España ya es el segundo país del mundo en tasa de estudiantes de medicina por número de habitantes, solo superada por Corea del Sur, y todavía hay proyectos de creación de nuevas facultades como la que plantea la Universidad de Alicante", explican desde la Delegació d’Alumnes de Medicina (DAM).
Aprovechando el contexto de la mesa redonda, los representantes estudiantiles de Valencia se reunirán con los de las otras dos universidades públicas para planificar las acciones en contra de la apertura de esta nueva facultad en la Comunitat
Valenciana.
“Queremos que en esta mesa se responda a las incógnitas planteadas desde hace tiempo como a qué interés responde el intencionado auge de abrir nuevas facultades de Medicina en España o si es realmente coste-efectivo invertir tal cantidad de recursos para aumentar el número de plazas en un sistema ya colapsado”, subrayan los organizadores de esta mesa redonda.
Clamor conjunto
A principios de abril, representantes del Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina mantendrán una reunión con Josefina Bueno, Directora General de Universidades de la Generalitat Valenciana, para definir la problemática y soluciones a nivel autonómico, al no haber participado en la mesa redonda.
Los estudiantes se suman así a las reivindicaciones realizadas por el Foro de la Profesión Médica Española, que ha expuesto en diversas ocasiones la necesidad de una mayor coordinación entre las instituciones representativas de la profesión y las autoridades sanitarias y educativas para garantizar una formación de calidad en las facultades que resuelva las necesidades futuras de médicos.
"Debemos garantizar la calidad de la formación del médico en nuestras facultades y hospitales universitarios. La sociedad exige, y se merece, unos médicos excelentes. No podemos permitir que una nueva Facultad en Alicante merme la calidad de las prácticas de nuestros compañeros de la Universidad Miguel Hernández. No todos los hospitales están preparados para la docencia.", concluyen.
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