Huelga médica por el Estatuto Marco: paros los últimos martes de cada mes

La Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM) ha cumplido su amenaza y ha convocado una huelga para el próximo 23 de mayo. Según el documento de preaviso, al que ha accedido Redacción Médica, el objetivo del paro es la "retirada inmediata" del borrador del Estatuto Marco que se halla en pleno debate del Ámbito de Negociación, además del establecimiento de una mesa de negociación con el Comité de Huelga a fin de acordar una norma específica que regule las condiciones laborales del colectivo médico y facultativo. La huelga, concretan desde CESM, comenzará el próximo día 23 de mayo, como ya habían avanzado este martes, y consistirá en un paro diario al mes, siempre el último martes que no sea festivo. Este periódico ha podido confirmar que el preaviso ya está registrado en los ministerio de Trabajo y Sanidad, además de en el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa).

El ente que aglutina a la mayoría de sindicatos médicos critica el actual sistema de representación sindical en el Ámbito de Negociación, que implica que “quien no es médico y facultativo decida los derechos y obligaciones de este colectivo” y su “singularidad” en “su actividad profesional”. Cabe recordar que CESM está representado en la mesa dentro de la Federación de Sindicatos de Sanidad y Educación (FSES), una circunstancia que, según la Confederación, conlleva que las reivindicaciones médicas queden “diluidas”.

CESM justifica la convocatoria de huelga por la imposibilidad de “establecer una nueva forma de negociación” por la “premura” que requiere la modificación legislativa que se negocia actualmente. Entre sus objetivos con esta medida se encuentran, además de la “retirada inmediata” del borrador del Estatuto Marco, la articulación de “una norma específica del colectivo médico y facultativo que regule sus condiciones singulares de trabajo”.

¿Qué reclaman los médicos de CESM?

“Como mínimo”, se exige que esa pretendida norma se recojan aspectos como el reconocimiento de una jornada de trabajo ordinaria y una voluntaria extraordinaria o de guardia en las que se contemplen “descansos, libranza computable, retribución, tiempos y zonas de descanso, dietas obligatorias y modos y formas de desplazamiento en atención a la ciudadanía fuera de los centros de trabajo”.

También piden que se reconozcan los “tiempos reales de trabajo” a efectos de fijar la edad de jubilación, “con independencia de establecer sistemas objetivos e incentivados para la prórroga de permanencia en el servicio activo y jubilación forzosa”. También reclaman la exención para hacer guardias de forma voluntaria a partir de los 50 años sin perder poder adquisitivo, una “retribución justa y adecuada” con “el pago pleno de las pagas extraordinaria”, la creación del grupo profesional A1 plus y también que se articule una nueva regulación laboral del colectivo MIR “que mejore sus condiciones laborales y formativas”.

Comité de huelga y servicios médicos mínimos

El Comité de Huelga lo lideran el secretario general y el presidente de CESM, Víctor Pedrera y Miguel Lázaro, respectivamente, y lo completan Clemente Casado, María José Rodríguez, José María Soto, Jorge Juan Curiel, Rafael Ojeda, Ángel Tocino y María José García.

En el preaviso también se recuerda que la huelga conllevará establecer unos servicios mínimos “que impliquen, por un lado, un mínimo perjuicio para los usuarios, y por otro, el derecho de los trabajadores públicos, teniendo en consideración el carácter público de los servicios sanitarios afectados”.

A la espera de los 'otros' sindicatos médicos

Otra cosa será el grado de seguimiento que tenga la huelga médica. Aunque el Sindicato Médico Andaluz (SMA) sí confirmó su respaldo a la iniciativa, la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (Amyts), Metges de Catalunya, el Sindicato Médico de Navarra (SMN) y el Sindicato Médico de Euskadi (SME) aún no se han pronunciado al respecto. Son las organizaciones que decidieron desligarse de CESM para crear la Agrupación Profesional por un Estatuto Médico y Facultativo (Apemyf), un ente provisional que persigue, como su nombre indica, el mismo objetivo final de conseguir una norma laboral específica para médicos, aunque desde una trinchera distinta de la de CESM.