El nuevo Código Deontológico médico, a finales de 2022 sin votar articulado

Los Colegios Oficiales de Médicos podrán disponer de su nuevo Código Deontológico antes de finalizar el año. Según ha podido saber Redacción Médica, la comisión deontológica trabaja en un único borrador que distribuirá entre los 54 Colegios de Médicos, evitando así que se alargue el proceso en el debate de cada uno de los artículos, tal y como se hacía antes. 

Con vistas a reducir los tiempos y cohesionar las posturas en los temas más relevantes, una mesa de ocho especialistas está trabajando en la redacción del borrador que ya adelantó Redacción Médica. La novedad en la tramitación del documento viene dada en el texto previo al código final, así los Colegios podrán señalar sus alegaciones ante un único borrador ya consensuado, sin que se abra un nuevo debate artículo por artículo. 

De este modo, antes de su aprobación y publicación final, los colegios de médicos dispondrán durante dos meses del borrador que se haya acordado por la Comisión Deontológica. Tiempo suficiente, según fuentes de la Comisión, para señalar los posibles cambios sin entrar a debate en la enunciación concreta de cada uno de los artículos. Una fórmula que evitaría la dilatación en el tiempo del texto final, dando prioridad al consenso general.

Así, cabe destacar que, tal y como han señalado fuentes directas a Redacción Médica, el debate de cada uno de los artículos y la redacción de los mismos se está llevando a cabo de forma previa, consensuando las posibles discrepancias en temas de terminología con el objetivo de que los Colegios puedan centrarse en el contenido en sí y no en las expresiones utilizadas.

Finalmente, con los dos meses de margen para su estudio, los Colegios que así lo requieran podrán presentar sus alegaciones a un único borrador, dando su aprobación completa o cambios a nivel de contenido, sin entrar en las formas.

Novedades del Código Deontológico

El borrador previo del Código Deontológico incluye varias consideraciones éticas a las que actualmente se enfrentan los facultativos españoles. Así, destaca la inclusión de la telemedicina o las redes sociales tanto en su uso privado como en el ejercicio de la profesión.

De este modo, aunque la base ética sigue siendo la misma, se han sumado las nuevas tendencias y realidades así como el posicionamiento ante las nuevas legislaciones que tramitan el aborto o la eutanasia. Dentro de las posibles categorías de objeción de conciencia, el borrador trata los conocidos como "vientres de alquiler", posicionándose en contra y definiéndolo como "un atentado contra la dignidad de la mujer y el bien superior del menor".

Ante las nuevas tecnologías, el futuro Código Deontológico incide en la importancia de la identificación de los facultativos en las distintas redes sociales. Así, se manifiesta la obligación de acreditarse y vigilar la confidencialidad de los pacientes y sus tratamientos.