Tomás Toranzo y Fernando Hontangas valoran el plan para permitir a ciertos colectivos profesionales retirarse antes

 Tomás Toranzo, presidente de CESM; y Fernando Hontangas, responsable del área de Sanidad Nacional de CSIF, piden la jubilación anticipada en sanidad.
Tomás Toranzo, presidente de CESM; y Fernando Hontangas, responsable del área de Sanidad Nacional de CSIF.


21 feb. 2024 17:50H
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El Gobierno ha abierto un resquicio de oportunidad para conceder a los profesionales de la sanidad el derecho a jubilarse antes. Médicos, enfermeros, técnicos y el conjunto de la sanidad vienen apelando desde hace años a las condiciones de penosidad, peligrosidad y mortalidad inherentes a su labor, que son los ‘indicadores’ que pretende usar ahora el Ministerio de Seguridad Social para cribar qué colectivos pueden o no acogerse a esta vía. No albergan dudas al respecto los agentes sociales, que apuntan a la crisis del covid y las “consecuencias que aún se arrastran” como ejemplos inequívocos del riesgo inherente al sector.

“Hay puestos en los que el índice de absentismo de los trabajadores crece de forma exponencial obligados por alguna enfermedad. Si se retiran y eso les supone una pérdida de pensión, parece que se les está castigando”, alega Fernando Hontangas, máximo responsable del área sanitaria de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF). En la misma línea, Tomás Toranzo, presidente de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), sostiene que los facultativos cumplen “todos los requisitos y algunos más” para poder acogerse a esta vía. “Incluso si se mejoraran las condiciones de trabajo de los médicos, se seguirían dando las circunstancias para ello”, subraya.

En declaraciones a Redacción Médica, ambos dirigentes se han referido al borrador de real decreto sobre jubilación anticipada sin merma en la pensión que el Gobierno ha trasladado a algunos sindicatos. El documento no hace referencia aún a colectivos concretos que puedan beneficiarse de esta norma, pero sí especifica algunos “indicadores objetivos” para definir qué trabajos son considerados como peligrosos, penosos o tóxicos.

En cualquier caso, tanto CESM como CSIF sostienen que los trabajadores de la sanidad ya podrían retirarse antes de forma voluntaria al amparo de la Ley de Seguridad Social. “Lo demás son todo especulaciones, no hay nada nuevo; lo que se tiene que hacer es iniciar el procedimiento”, desliza Tomás Toranzo.

Fallecimientos y bajas en el sector de la salud


Precisamente, una comitiva de CSIF liderada por Fernando Hontangas se ha dirigido a Bruselas para reivindicar ante los grupos de la Eurocámara el derecho de los profesionales de la sanidad española a jubilarse antes de la edad legal ordinaria. Consultado por este periódico, el sindicalista ha puesto como ejemplo el caso de las enfermeras y las TCAE, colectivos con “un importante índice de accidentes y enfermedades” provocadas por su labor diaria.


"Una persona que padece por una enfermedad a consecuencia de su trbaajo tiene que poder tomar la decisión de jubilarse antes sin que merme su pensión"



“Es una reivindicación totalmente justa. Una persona que padece por una enfermedad a consecuencia de su trabajo tiene que poder tomar la decisión de jubilarse antes de la edad ordinaria sin que merme su pensión” incide el dirigente de CSIF, quien recuerda que sigue habiendo trabajadores del sistema de salud que arrastran secuelas del covid (como el llamado covid persistente).

Este mismo virus provocó también un número considerable de muertes en el sector de la salud. Según un estudio del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (Cgcom), solo en el primer año de pandemia fallecieron 112 facultativos. A escala internacional, Amnistía Internacional eleva la cifra a 17.000.

Otros estudios también corroboran el discurso de sindicatos y asociaciones de médicos. Según la última estadística de accidentes de trabajo publicada por el Ministerio de Trabajo, el número de profesionales sanitarios que perdieron la vida en el trabajo se multiplicó en 2023 respecto al año anterior. En concreto, entre enero y diciembre de este ejercicio hubo 13 accidentes mortales en el sector, seis más.

En lo que respecta a los accidentes graves, el número de casos se situó el año pasado en 209. Es decir, 18 más que en 2022.

Condicionantes para la jubilación anticipada en sanidad


Acerca de esas razones que motivan que los médicos (“y otras profesiones sanitarias”, matiza Toranzo) puedan jubilarse hasta diez años antes, como contempla el borrador del RD para los casos más manifiestos, el presidente de CESM señala a los condicionantes “inherentes” a su labor, las guardias o la exposición a tóxicos. Pero también alude a otros componentes como son el estrés y la necesidad de tomar de decisiones difíciles de las que puede depender la vida de un paciente. Hontangas alude también a la turnicidad y a la itinerancia de algunos puestos.

En este escenario, Toranzo reitera que la Medicina cumple “todos los requisitos” de otros profesionales que ya tienen la opción de jubilarse antes, como policías locales o los bomberos, “y algunas más”. “Nosotros no queremos ser una profesión de riesgo, estaríamos encantados si no lo fuésemos. Pero incluso si se mejoraran las condiciones de trabajo de los médicos, seguirían cumpliendo los requisitos para tener la jubilación anticipada”, continúa.

¿Jubilación a los 57 años en sanidad?


El borrador de real decreto que maneja el Gobierno abre la puerta a que profesionales de ciertos colectivos puedan jubilarse, si se dan las condiciones para ello, hasta diez años antes con el 100 por ciento de la pensión. En ningún caso podría ser esta edad anterior a los 52 años, aunque solo un puñado de oficios podrían llegar a tal extremo.

Todo dependerá del tipo de trabajo y sus condicionantes. Por el momento, el Ministerio de Seguridad Social no incluye en esta lista a la sanidad, aunque la situación podría dar un giro en próximos meses. 

En la actualidad, la edad de jubilación legal ordinaria se encuentra en los 66 años y seis meses (si la trayectoria laboral suma 38 años, es posible retirarse a los 65), aunque en el horizonte próximo la franja se situará en los 67 años.

Según las informaciones que han trascendido, en algunos colectivos se podría contemplar un adelanto de hasta diez años de la edad de retiro, lo que dejaría en los 57 la horquilla máxima a la que aspirarían los profesionales de la sanidad en caso de, en un futuro, que se den todas las circunstancias.
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