Dos 'síntomas' que no dejan de derivar médicos de Familia a Urgencias

Médicos de Familia que trabajan en diferentes Servicios de Urgencias analizan la crisis de su especialidad en Atención Primaria, tras quedarse 246 plazas sin asignar tras dos rondas en el MIR 2024. Estos facultativos analizan las diferencias entre trabajar en un hospital y un centro de salud e identifican los desafíos de Primaria para recuperar su salud: dignificarla, potenciarla y prestigiarla, para que el médico de Familia sea el sistema, y crear la especialidad de Urgencias y Emergencias.

"Hay que dignificar Atención Primaria y el modelo que teníamos en que el médico de Familia era el sistema", ha asegurado a Redacción Médica el jefe del Servei d'Urgències del Hospital Universitari Arnau de Vilanova (HUAV), Oriol Yuguero, quien ha matizado que "quedan muchas plazas vacantes porque se ofertan muchas". A su parecer, "se tiene que hacer un replanteamiento que implique dinero y organización por parte del Ministerio de Sanidad y el Departament de Salut".

Yuguero ha criticado el desconocimiento de las facultades de Medicina del trabajo que hace Familia, que concentra "el 80 por ciento de enfermedades", y también "de la realidad social del sistema de Atención Primaria, que se está desmembrando". Incluso, el jefe del Servei d'Urgències ha instado a "potenciar Primaria; no hacer más grande el hospital, porque necesito una buena Primaria que pueda visitar al paciente en 48 horas". De esta forma, con impulso y medidas de discriminación positiva para esta red asistencial, Urgencias realmente recibirá pacientes con enfermedades agudas.

Echando la vista atrás, Yuguero reconoce que acabó la especialidad en 2013 y se interesó por trabajar en el hospital porque le ofrecía estabilidad, a diferencia de los centros de salud. "La mayoría íbamos al paro porque nadie hizo un ejercicio de planificación. Es lo que estamos pagando. Muchos se fueron a otros países, otras comunidades autónomas o la sanidad privada". Por último, el jefe del Servei d'Urgències del HUAV ha abogado por reconocer a los médicos de Familia como lo hace parte de la población, que tiene una "buena percepción" de su trabajo.

Media jornada en Primaria y media en Urgencias

Por su parte, una médica que prefiere mantenerse en el anonimato y trabaja en el área de Barcelona media jornada en un centro de Atención Primaria y otra media en Urgencias en un hospital ha relatado cómo es su día a día y qué diferencias encuentra entre ambas redes asistenciales. Esta facultativa ha explicado que antes asumía sobrecarga de trabajo para llegar a todo, pero decidió parar "porque me estaba poniendo enferma. Por querer hacer bien mi trabajo estaba perdiendo salud".

Esta médica lamenta que en Primaria el tiempo de atención por paciente no es suficiente, diez minutos con suerte, aunque hay más de una visita agenda a la misma hora, y tiene la sensación de ir "siempre corriendo y no poder ver la gente como desearías. Es vocacional y me gusta, pero no te llena tanto porque no tienes tiempo". Además, otros de los problemas es que los parámetros marcados por direcciones y gerencias para evaluar el trabajo difieren de la asistencia, porque "te incentivan a hacer ecografías, entre otras tareas, pero a la vez te desincentivan porque si lo haces no cumples con lo otro".

En cambio, "en Urgencias dedicas el tiempo que el paciente necesita, aunque debes ir rápido para que no se genere mucha espera", ha indicado la médica. Otra de las ventajas es que "cuando llega tu hora de fin de guardia, llega otro fresco y sigue tu trabajo. En Primaria no sucede, nadie te reemplaza". Por último, esta facultativa ha lamentado que otro de los inconvenientes en Primaria son las derivaciones con el especialista, que en ocasiones se devuelven y se pierde la pista del caso, mientras que en Urgencias el especialista puede atender tras la observación del médico. "Te da rabia porque Familia es una especialidad muy completa. Los estudiantes en la rotación lo ven y prefieren no hacer la especialidad y, si la hacen, en otro país, que además está mejor remunerado", ha lamentado.

Por último, el también especialista en Medicina Familiar y Comunitaria y jefe del Servicio de Urgencias del Hospital Universitario de A Coruña, José Manuel Fandiño, quien se decantó por Urgencias por una decisión vocacional, ha manifestado que la creación de la especialidad de Urgencias y Emergencias "será positivo para Medicina Familiar y Comunitaria. El gran éxito de crear la especialidad es que será compartido".

Fandiño ha estimado que con la especialidad implantada las unidades docentes de Primaria "sabrán cuántos facultativos van a tener, porque en un porcentaje muy elevado acabarán la especialidad y se quedarán allí". A su criterio, la situación de déficit de profesionales en el sistema sanitario, que será peor en 2028 según algunos informes, está provocada por "la caída en inversión en sanidad respecto al PIB por la crisis económica u otras causas". No obstante, Fandiño ha abogado por cada médico, como hace él y especialmente de Familia, "debe prestigiar y dar valor aquello que hace".