Isabel Jimeno, responsable del Grupo de Vacunas de la SEMG.
"Estamos muy acostumbrados a pensar que la
vacunación es cosa de niños. Y eso no es así".
Isabel Jimeno, coordinadora del Grupo de Vacunas de la Sociedad Española de Medicina General y de Familia (SEMG), es una gran defensora de que las vacunas lleguen a toda la población, especialmente a los pacientes crónicos. Por eso, durante la
VII Jornada Dual Neumológica que ha organizado la sociedad en Málaga, durante los días 28 y 29 de febrero, ha hablado sobre la importancia que tiene la vacuna antineumocócica en aquellos pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (
EPOC). Y sobre la necesidad de que en la consulta de
Atención Primaria se insista en esto con los pacientes.
Isabel Jimeno explica la importancia de la vacuna antineumocócica.
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"La vacunación es importante a lo largo de toda la vida, no solo en niños pequeños -asegura Jimeno-. El paciente EPOC es más susceptible a pedecer
infecciones por neumococo, fundamentalmente
neumonía neumocócica", asegura Jimeno.
La experta explica que los últimos estudios, publicados en 2019, señalan que la vacuna anineumocócica tendría un beneficio potencial. "De las neumonías ingresadas, el 42 por ciento se deberían a los serotipos vacunales que están incluidos en la
vacunación antineumocócica conjugada 13 valente, que casualmente es la misma vacuna que ponemos a los niños cuando son pequeños", asegura.
Evitar los ingresos hospitalarios
En en caso concreto de los pacientes con patología respiratoria se debe poner por la posibilidad de tener
exacerbaciones y
crisis que ocasionan ingresos, muchos de ellos son por neumococo. "La posibilidad de que el paciente respiratorio ingrese con respecto a un paciente sano se multiplica por cinco".
"La posibilidad de que el paciente respiratoria ingrese con respecto a aun paciente sano se multiplica por cinco"
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"Y el paciente con patología respiratoria es un paciente cuya calidad de vida está tocada. Si a eso se le añade que pueda ingresar con una neumonía neumocócica, cuando se le de el alta su calidad de vida va a ser todavía peor. Pero es que además la
letalidad que tiene esta neumonia en un paciente con EPOC, o con cualquier otra patología crónica ,se mantiene durante los
diez años siguientes".
Para Jimeno lo ideal sería que, como mínimo, todos los pacientes crónicos se vacunen. Ella trabaja en la Comunidad de Madrid, donde vacunan a partir de los 60 años para que el sistema inmunitario esté más joven y su respuesta sea mejor. Este, con lae dad, se hace mucho más susceptible a enfermedades infecciosas, como se está viendo con el coronavirus: las personas de más edad con patologías crónicas son la mayor población de riesgo. Lo mismo ocurre con la
enfermedad neumocócica.
Trabajo en Atención Primaria
El problema, asegura, es que entre los mayores de edad se está poniendo tanto. "Los adultos pensamos que no necesitamos vacunación, que las vacunas son solo cosas de niños. Y ese es el trabajo de médicas y enfermeras en
Atención Primaria, pero también de hospitales: la misión de cualquier personal sanitario es informar a nuestros pacientes de la importancia que tiene la vacunación a cualquier edad y, sobre todo en los adultos", asegura. En el caso de la Atención Primaria, la implicación tiene que ser plena. Añade que ellos son los más accesibles. Los pacientes les conocen, y los profesionales también a ellos. Así que hay que insistir.
Jimeno también resalta que hacen falta
más campañas. "Las vacunas más importantes en adultos son la de la gripe y la antineumocócica. Pero solamente nos enteramos cuadno empieza la campaña de la gripe o bien cuando los pacientes empiezan a ingresar en hospitales y no hay camas. En ningún momento en medio de toda la temporada se dice nada de vacuna", afirma.
"Y nunca se explica vacunación antineumocócica -añade-, que tiene el mismo peso que tiene la gripe. Y además tiene una
comodidad: que se pone una una sola vez en la vida y no todos los años, como en la gripe".
Un momento de la entrevista durante la VII Jornada Dual Neumológica de la SEMG.
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