Flemming Ornskov, CEO de Shire.
Shire ha tenido que recortar sus expectativas económicas de cara al futuro. La compañía ha reconocido que no alcanzará los
ingresos previstos para 2020, de unos 20.000 millones de dólares (unos 16.711 millones de euros) a 17.000 millones de dólares (14.255 millones de euros).
Esta previsión se hizo cuando la
farmacéutica adquirió Baxalta. La causa de este descenso se ha debido a la aparición de nuevos medicamentos de la competencia y la competencia de los genéricos.
De hecho, esta situación ha llevado a la compañía a anunciar que separará su negocio en dos divisiones principales: neurociencias y enfermedades raras.
En el mercado bursátil no ha gustado esta información. En el momento en el que se dio a conocer, sus acciones cayeron hasta un seis por ciento.
“Estamos enfrentando cierta competencia adicional en hematología", reconoció el propio
Flemming Ornskov, CEO de Shire.
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