Emma Walmsley, CEO de GSK.
La compañía farmacéutica
GSK ha registrado un
beneficio neto atribuido de 1.790 millones de euros en el primer trimestre de 2020, lo que equivale a un
incremento del 47 por ciento en comparación con el mismo periodo del año anterior, según ha informado este miércoles la empresa.
La
facturación de la empresa entre enero y marzo se elevó un 18,7 por ciento, hasta
10.406 millones de euros. Por segmentos de negocio, la
división farmacéutica aumentó sus ingresos un 6 por ciento, hasta 5.032 millones de euros.
Por su parte, el área de
vacunas registró una cifra de negocios de 2.066 millones de euros, un 19 por ciento más. La rama de productos de
cuidado personal y medicamentos sin receta ingresó un 44 por ciento más, hasta 3.276 millones de euros.
"Nuestros negocios rindieron bien en el trimestre, con crecimiento en ventas y beneficios, reflejando el buen rendimiento subyacente y la mayor demanda, incluyendo las compras preventivas, de muchos de nuestros productos", ha explicado la consejera delegada de GSK,
Emma Walmsley.
El coste de los productos vendidos en el trimestre fue de 3.662 millones de euros, un 17,1 por ciento más, mientras que los gastos de venta, generales y administrativos crecieron un 17,7 por ciento, hasta 3.338 millones de euros. La partida de
investigación y desarrollo (I+D) se situó en 1.359 millones de euros, un 18 por ciento más.
Los abultados cambios de cifra en el trimestre se corresponden con la
inclusión de la cartera de Pfizer de medicamentos sin receta, ya que GSK cuenta con una participación del 68 por ciento en la 'joint venture' formada entre ambos, por la consolida en sus cuentas.
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