En Farmaindustria no gusta que Esteve manche su libro de buenas prácticas

Redacción. Madrid
La reciente intervención de su presidente, Antoni Esteve, en la Real Academia de Farmacia para protagonizar una conferencia sobre responsabilidad social no ha sido bien recibida en Farmaindustria. Según ha podido saber Redacción Médica, especialmente poco ha gustado su mención al código de buenas prácticas, el sistema de autorregulación del que aseguró  que “hace especial hincapié en transparentar las relaciones de los laboratorios con profesionales y organizaciones sanitarias”. En el entorno de la patronal hay quienes se han mostrado críticos con esta alusión, temiendo que el hecho de ser realizada por el mandatario de un laboratorio bajo sospecha pueda minar su credibilidad.

El presidente de Farmaindustria, Antoni Esteve.

Recién llegado de Japón y como si nada hubiera pasado. Así se presentó Antoni Esteve ante el respetable. En su intervención, el presidente de la patronal Farmaindustria reclamó que la actividad de la misma esté permanentemente regida por la ética y la transparencia. Dos aspectos que, precisamente, brillan por su ausencia en la supuesta relación del Grupo Esteve con el escándalo de las comisiones en Cataluña durante su mandato.

En su obra cumbre, El Príncipe, Nicolás Maquiavelo asegura que de vez en cuando las palabras deben ocultar los hechos. Dadas las circunstancias que envuelven a Esteve, a más de un asistente a la conferencia le vino a la mente esta aseveración  al escuchar al que fuera su máximo responsable. En ella aseguró que “todas las relaciones que mantenemos con los colectivos del entorno, ya sean pacientes, profesionales o instituciones, deben desarrollarse de acuerdo a los más elevados estándares de ética y transparencia”.

Ninguna de las dos premisas planteadas por el máximo  representante de los laboratorios farmacéuticos durante su conferencia se cumplen en el caso de Esteve.  Y es que el grupo se encuentra entre los principales donantes entre 2008 y 2013 a las  fundaciones CatDem y Fórum Barcelona, ligadas a Convergencia Democrática de Cataluña (CDC) e investigadas por la Fiscalía Anticorrupción ante la sospecha de que dichas aportaciones fueran en realidad comisiones ilegales a cambio de licitaciones públicas.

Además de este comportamiento, alejado de la ética más allá de una legitimidad que deberán juzgar los tribunales llegado el caso, el laboratorio tampoco es ningún ejemplo de transparencia. De hecho, desde el mismo momento en que El País publicó el listado de donaciones a CatDem al que Esteve aporta 325.000 euros, el silencio se ha impuesto en el grupo, que lejos de trabajar para alejar cualquier tipo de sospecha ha mantenido una política de comunicación con la única consigna de la absoluta opacidad que choca frontalmente con la tesis defendida por el también presidente de Farmaindustria.

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