Karl-Ludwig Kley, presidente de Merck.
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Redacción. Madrid
El laboratorio alemán Merck multiplicó por dos su beneficio neto en 2013, hasta alcanzar los 1.202 millones de euros, un 112 por ciento más que en 2012, una cifras que la compañía ha podido lograr gracias a la reducción de costes acometida durante el pasado año.
Estos resultados son positivos a pesar de que los ingresos totales cayeron un 0,7 por ciento, hasta los 11.100 millones de euros. Sin embargo, el beneficio operativo de explotación (Ebitda) subió el pasado año hasta los 3.069 millones, en parte gracias al dinamismo de Merck en los mercados emergentes. Latinoamérica y Asia (sin Japón) contribuyeron a un crecimiento orgánico del 9,3 por ciento. .
Karl-Ludwig Kley, presidente de la multinacional, reitera que la compañía ha reducido “costes más rápidamente de lo previsto para impulsar la transformación del consorcio”. Asimismo, entre lo que más ha apoyado el crecimiento de la compañía durante 2013, destaca que la ampliación de la "presencia en mercados de crecimiento globales”.
Para 2014, Merck prevé un pequeño crecimiento orgánico de la facturación y del beneficio.
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