José María Moraleda.
José María Moraleda finaliza su ciclo al frente de la
Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH) y conversa con Redacción Médica sobre los logros de la profesión en un momento donde está adquiriendo la mayor relevancia científica sin dejar de lado la parte clínica. Y es que, como él mismo los define, “los hematólogos somos médicos científicos”.
Tanto desde el punto de vista profesional como desde el punto de vista laboral, califica esta experiencia como de altamente satisfactoria. Su mayor éxito al frente de la sociedad sin duda es que “hemos devuelto el poder a los socios y dotado de
transparencia a la gestión”. “Hasta hace pocos años, la gestión dependía de una empresa, hemos cambiado ese esquema, ahora la fundación (FEHH) tiene personal propio y nos ha permitido gestionarla”.
El apoyo a la investigación el otro aspecto que destaca Moraleda: “En un periodo de crisis, hemos pasado de conceder tres becas de 15.000 euros a siete de 35.000 euros”.
La troncalidad, a punto
Como tema pendiente, Moraleda destaca la troncalidad, donde “hemos trabajado junto a la comisión de la especialidad enfocando el programa a las
competencias que Europa nos exige”. El Ministerio de Sanidad ya tiene en su poder un documento donde se detallan las competencias específicas que se requieren, elaborado con el apoyo de la
Sociedad Europea de Hematología (EHA). “Solo está pendiente que se finalicen los aspectos administrativos de las competencias troncales”, explica.
El presidente saliente de la SEHH es consciente de que la Hematología es una gran desconocida para el ciudadano, y por eso se ha esforzado en darla a conocer al a sociedad, con su doble vertiente de práctica clínica y laboratorio. “El hematólogo está muy bien dotado para la investigación, y capaz de realizar innovaciones muy relevantes para la medicina personalizada”.
Uno de los mayores avances de los últimos años en investigación es sin duda la terapia celular donde, aunque la mayor parte de las veces sea de forma experimental, está dando un paso adelante decisivo hacia la práctica clínica. El presidente de la SEHH (hasta su próximo congreso, a
finales de mes) sostiene que “va a ser una revolución: el uso de
CAR-T cells está dando
respuestas del cien por cien en leucemias donde el paciente ya ha recaído tras todos los tratamientos disponibles”.
La experiencia en esta disciplina —“llevamos más de 50 años haciendo trasplantes de células”— le hace ser claro en que “los hematólogos tienen que liderar esta innovación”. Sin perder la humildad, recalca que van a necesitar de otros especialistas, pues la terapia celular exige un
espíritu pluridisciplinar. La SEHH está pleno trabajo de estandarizar técnicas y componentes, características de los laboratorios y cada elemento útil, así como en proceso de
definición de las unidades de referencia para la investigación y el desarrollo de la terapia.
Líderes mundiales en Hematología
Como proyecto relevante que dejará a su sucesor (Jorge Sierra, director del Servicio de Hematología del Hospital de la Creu i Sant Pau) está el establecimiento de un
registro de pacientes, “muy importante para programar recursos en sanidad”. La SEHH ya han puesto en marcha uno en síndromes mielodisplásicos (“probablemente, el mayor del mundo”) y también hay uno de enfermedades oncohematológicas, que “estamos viendo cómo convertirlo en un registro de utilidad pública”.
Moraleda se despide del cargo consciente de que la Hematología española “es de las más reconocidas a nivel internacional”. Un único detalle lo ejemplifica: “en
mieloma, la enfermedad se define con parámetros españoles”.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.