Rebeca Bailén, médico adjunto en la unidad de trasplante y terapias avanzadas del Gregorio Marañón.
El
uso de la terapia CAR-T a la hora de tratar el
linfoma de células B grandes ha cosechado grandes resultados hasta la fecha entre la población, pero aún no había una clara evidencia que también fuera igual de eficaz entre los
pacientes mayores de 70 años. Esta incógnita ha sido resuelta después de que el Grupo Español de Trasplante Hematopoyético y Terapia Celular (
GETH) hayan concluido en una investigación que la terapia avanzada es igual de eficaz con este tipo de pacientes, sin que la mortalidad aumente, por lo que también puede ser administrada por parte del Sistema Nacional de Salud (
SNS).
Una de las principales investigadoras de este estudio publicado en la revista
ScienceDirect es
Rebeca Bailén, médico adjunto en la unidad de trasplante y terapias avanzadas del
Hospital Gregorio Marañón. La especialista explica en
Redacción Médica que desde que empezó la
terapia CAR-T en España en el año 2019, “el GETH viene recogiendo todos los datos de los pacientes tanto de eficiencia y de seguridad. Desde la institución se planteó si
la CAR-T era igual de eficaz e igual de tóxica en los pacientes de edades más avanzadas que la población joven”.
Este grupo de población no suele formar parte de los ensayos clínicos, debido a que, en palabras de la especialista, “normalmente se tiende a
coger a personas con menos comorbilidad. Esta terapia
no la pueden asumir todos los pacientes, por lo que hay que estar suficientemente bien para poder recibir el tratamiento, además de que son muy costosos económicamente”.
"La terapia CAR-T no puede ser asumida por todos los pacientes a la hora de aguantar el tratamiento"
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Debido a estos motivos, la administración de
esta terapia en el sistema sanitario “debe vigilarse para que sea siempre eficaz y que el beneficio vaya a ser real. En este sentido, es muy importante que los pacientes más añosos no sufran más toxicidad por el tratamiento”. En este sentido, la especialista considera que “todos los tratamientos deben de usarse con cierto sentido común y eficacia”.
Tasas de recaída y supervivencia con CAR-T ante linfoma B
Después de recoger información de
412 pacientes infundidos en España con CAR-T y que de las cuales
71 tenían 70 años o más, Bailén relata que después de
compararse ambas poblaciones, “los datos de eficacia son exactamente iguales y los pacientes tienen
la misma tasa de recaída y la misma probabilidad de respuesta, además de la
misma tasa de supervivencia”. Uno de los aspectos que sí se ha detectado es que los pacientes más mayores “tienen potencialmente más probabilidades de sufrir el
síndrome de liberación de citoquinas, concretamente de los grados más graves. Pese a ello, no provoca que los pacientes tengan más mortalidad por el tratamiento”.
"Los datos de eficacia son exactamente iguales y también se tiene la misma tasa de recaída entre las dos poblaciones"
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La principal conclusión que extrae la especialista del
Hospital Gregorio Marañón es que “no hay ningún dato que diga, con los datos encontrados, que los pacientes mayores de 70 años tengan unos resultados peores que uno de 60 o menos. Debido a ello, se puede ofrecer el tratamiento con las mismas garantías”. La especialista es consciente de que la población “va a ser
más mayor con el paso del tiempo, por lo que es importante saber que este tipo de opciones terapéuticas también se puede ofrecer a la población más mayor”.
Los hospitales que participaron en la investigación CAR-T
El hospital madrileño ha liderado esta investigación española, aunque han participado otros hospitales a lo largo y ancho de toda España como son el
Hospital Vall d’Hebrón, el
Hospital Universitario Germans Trias i Pujol, el
Hospital Clínic de Barcelona, el
Hospital Universitario Virgen del Rocío, el
Hospital Clínico Universitario de Salamanca, el
Instituto de Investigación Sanitaria Incliva, el
Hospital La Fe de Valencia, el
Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, el
Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín y el
Hospital Universitario La Paz.
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