Redacción. Madrid
Las pacientes con apnea obstructiva del sueño no corregida corren mayor riesgo de accidentes cardio y cerebrovasculares –como la enfermedad coronaria y el ictus– de acuerdo con un estudio prospectivo llevado a cabo en dos hospitales españoles entre 1998 y 2007. Hasta la fecha, la mayoría de investigaciones se ha ceñido a los varones pese a que también las féminas padecen con relativa frecuencia los síntomas del trastorno respiratorio mencionado.
En efecto, desde hace años, múltiples estudios con cohortes compuestas en su mayoría por hombres han asociado la apnea obstructiva del sueño con un incremento del riesgo cardiovascular. En mujeres, la apnea es un trastorno común, al igual que sucede con los accidentes cardiovasculares que se encuentran entre las primeras causas de morbilidad y mortalidad.
Francisco Campos-Rodríguez.
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A pesar de estas evidencias, el efecto de la apnea del sueño y su tratamiento en la incidencia de episodios cardiovasculares en mujeres no había sido investigado hasta el momento. En este sentido, el estudio, realizado por expertos neumólogos y publicado en el
American Journal of Respiratory and Critical Care Medicine, revela que las mujeres con apnea no tratada padecen un mayor riesgo de sufrir problemas cardiovasculares graves, en especial el ictus: “No existía literatura científica en la que se estudiaran los efectos cardiovasculares en las mujeres con apnea obstructiva del sueño; éste es el primer estudio que investiga tal asociación en una cohorte exclusivamente femenina, con más de 950 mujeres”, ha explicado Francisco Campos-Rodríguez, autor del estudio y miembro de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ).
“Los resultados de los estudios realizados en cohortes de hombres no son extensivos al género femenino debido a las diferencias de prevalencia, severidad, fisiopatología y riesgos cardiovasculares existentes entre ambos sexos “, ha subrayado.
Otra de las conclusiones principales del estudio es que el tratamiento de la apnea del sueño con terapia de presión continua de la vía aérea (CPAP) puede reducir dicho riesgo cardiovascular. Cabe destacar que, en las mujeres que empezaron el tratamiento con CPAP, se observó una asociación independiente entre el número de horas de uso del aparato de presión continua y la reducción de la incidencia de accidente cerebrovascular o enfermedad coronaria. “Estas conclusiones sugieren que el grado de cumplimiento de la paciente es clave, ya que una mayor adherencia al tratamiento se asocia claramente con una menor incidencia de eventos cardiovasculares”, ha ratificado Campos-Rodríguez.
Los resultados del estudio también apuntan que el exceso de riesgo cardiovascular parece estar limitado a las mujeres más jóvenes: “Aunque es necesario seguir investigando en esta línea, cuando los resultados se estratificaron por edad, los efectos cardiovasculares más graves fueron observados en los casos de apnea no tratada en mujeres menores de 65 años”, ha señalado Campos-Rodríguez.
La adherencia al tratamiento previene la enfermedad
“Demostrado el riesgo cardiovascular latente en las mujeres con apnea del sueño, es necesario remarcar la importancia de acudir al neumólogo especialista para obtener un correcto diagnóstico y recibir el tratamiento adecuado. Un correcto cumplimiento del tratamiento asegura una mejora de la calidad de vida y ayuda en la prevención de posibles accidentes cerebrovasculares o cardiovasculares”, ha añadido.
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Role of Sleep Apnea and Continuous Positive Airway Pressure Therapy in the Incidence of Stroke or Coronary Heart Disease in Woman es un estudio prospectivo y observacional realizado en dos hospitales universitarios españoles, entre los años 1998 y 2007. Un total de 967 mujeres con sospecha de apnea del sueño y sin antecedentes de ictus o enfermedad coronaria fueron incluidas en el estudio.
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