Juan José Rodríguez Sendín y Verónica Casado, juntos durante la presentación del libro.
“Estamos
profundamente preocupados”. Al presidente de la Organización Médica Colegial, Juan José Rodríguez Sendín, no le gusta el rumbo que
ha tomado la troncalidad desde el pasado agosto, poco antes de que se diera el pistoletazo de salida a los programas específicos.
“Hemos sido
los grandes defensores de la troncalidad y hemos trabajado para buscar soluciones con las especialidades más discrepantes”, ha recordado Sendín para avisar de que “así, esto no va bien”.
El presidente de la OMC ha suscrito las razones para la preocupación que ha dado Verónica Casado, especialista en Medicina Familiar y Comunitaria: “Ha sido un programa
hecho únicamente por el ministerio con sus asesores”, ha acusado Casado durante la presentación del libro
Médicos de Familia, médicos de personas, este jueves en la sede de la OMC.
“La tristeza de la situación actual es que
no hay un programa sólido de troncalidad: no puede haberlo si no se definen claramente las competencias, los itinerarios formativos, los entornos de aprendizaje y los sistemas de evaluación”.
Oportunidad perdida
Casado ha tildado de “peligroso” introducir cambios en un sistema bueno de formación, uno de los referentes internacionales, sin que estos cambios aporten algo. “
Era una gran oportunidad para mejorar el sistema y tengo la sensación de que se va a convertir en una amenaza porque no está bien definido”.
Además, advierte de que el nuevo sistema puede introducir “
heterogeneidad”, desestructurándolo y dejándolo “en manos de cada una de las diferentes unidades docentes”. El objetivo de dotar al futuro profesional del SNS de una “perspectiva del sistema antes de elegir la especialidad” queda, con el planteamiento actual, bastante lejos.
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