El desasosiego de muchos
aspirantes a residente de Formación Sanitaria Especializada (FSE) se trasladaba este domingo a las redes sociales, donde existe un amplio consenso sobre la
“dificultad” de un examen MIR que, para algunos, evidencia la desconexión entre los expertos que lo confeccionan y las actuales corrientes del sector de la
Medicina.
La sensación que se respira en X es de cierto “desamparo”. “Siempre os admiro a los opositores, pero este año, además, os compadezco”, sostienen algunas voces del colectivo médico como
Jorge Macarrón, profesor de CTO Medicina, quien llama a la ‘tranquilidad’ a aquellos
estudiantes del MIR que han salido descontentos de la prueba. “
Si le ha parecido difícil, es que lo es, y mucho -ha destacado-. En la línea de las últimas convocatorias, y encima más largo”.
Según el propio Macarrón, hay preguntas que le hacen pensar a él mismo que cada vez sabe menos. “Pero tranquilidad, que difícil es para todos”.
Otro profesor de CTO, el pediatra de Urgencias
David Andina, conviene en la dificultad de unas pruebas que pocos, o muy pocos, podrían superar con garantías. “Hay preguntas de Pediatría que me atrevería a decir que son capaces de contestar correctamente
menos del 1 por ciento de los profesionales en activo”, ha denunciado.
“Qué tristeza que los que elaboran el examen MIR sigan a lo suyo, dinosaurios de los despachos que siguen empeñados en
‘hablar solo de su libro’”, ha añadido el facultativo, uno de los más críticos contra las pruebas de este sábado.
A juicio de Vicente Baos, médico de Familia, el
cuestionario MIR evidencia la desvinculación con la “realidad” de los que “redactan las preguntas del examen”. “Totalmente alejados pero
satisfechos de sus glorias pasadas, todos deberían acabar en la Academia Médico-Quirúrgica Española, en las vitrinas momificadas de la sede de Asisa”, ironiza.
Los propios aspirantes han dejado patente en las redes sociales su descontento con las preguntas escogidas. Hay quienes las catalogan, simple y llanamente, de “burrada”. “Muchísimas (por no decir la mayoría)
no se podían sacar con el temario estudiado -apuntaba una-. Además, conceptos ultra específicos y muy minoritarios”.
“Es un examen que poco discrimina y en el que poco hay que demostrar.
Puro azar, pura duda”, sentenciaba otro usuario que se pregunta “qué pretendían que los futuros residentes de este país demostraran”. “Hacer una
criba basándose en el azar de elegir entre tres opciones plausibles (y aleatorias) no es un baremo alguno de la validez de ninguno de nosotros”, sentencia.
Opiniones de esta naturaleza hay muchas. “A mí este examen me ha parecido una falta de respeto -apuntaba otra joven-. Un examen de médico general en el que te preguntan conceptos rarísimos y cosas muy rebuscadas. Si esto ha sido un castigo por parte del ministerio por las plazas vacantes de otros años se pueden ir bien lejos”.
Lo cierto es que se trata de un sentir semejante al de los aspirantes a residente de otros
colectivos como el PIR o el EIR. “Parece que
las preguntas las ponen viejas glorias de la enfermería que les jode que nos especialicemos. A mí que me lo expliquen”, bramaba uno de los candidatos a especialista en Enfermería.
Críticas contra los festejos a las puertas del MIR
Parte de las críticas de los usuarios de las redes sociales se han focalizado también sobre la actitud de quienes esperan a la salida de las facultades. Un
“show”, denuncian algunos jóvenes, que constituye una
“falta de respeto” para los propios aspirantes. “Ha sido vergonzoso. No nos dejáis salir tranquilos y sinceramente parece que salimos de infantil con tantas moñadas”, apuntaba.
Opiniones las hay de todo tipo. “Si en mi MIR, en el Jurásico, hubiera visto gente disfrazada a la salida, igual me hubiera parecido algo ridículo, pero con el tiempo he intentado centrar mi indignación en cosas importantes”, resumía otro usuario.
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