El permiso extra, flotador de Familia para dotarse de MIR extracomunitarios

En los últimos años, España ha sido un destino atractivo para estudiantes de medicina de todo el mundo que, tras graduarse en Medicina en su país, vienen a España a especializarse mediante el MIR. Sin embargo, para muchos MIR extracomunitarios, este camino lleno de esperanzas se convierte en una experiencia llena de frustración y desilusión al enfrentar la falta de oportunidades laborales debido a problemas con los permisos de residencia, una situación que contrasta fuertemente en una España con déficit de médicos, especialmente en el caso de Medicina de Familia. 

Pero lo cierto es que no se trata de un programa que busque la inserción de estos estudiantes en los hospitales españoles, sino que el objetivo, en todo momento, es la cooperación entre países para que se trate de un sistema de retorno de profesionales. Así lo explica Domingo Sánchez, representante de médicos jóvenes del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM).

“El objetivo no es que los estudiantes vengan a España a hacer el MIR y nos los quedemos, para eso habría que seguir otro procedimiento y meterse en leyes de extranjería, que son las que se aplican”, detalla Sánchez. “El retorno es la filosofía de este proceso y, si esta se modifica, se debe poner sobre la mesa ese nuevo cambio para que el ministerio correspondiente actúe al respecto”, comenta.

Desde su punto de vista, además, modificar el objetivo de retorno de estos médicos que vienen a especializarse a nuestro país, podría traer numerosas consecuencias para nuestro sistema sanitario tal y como se estructura en la actualidad. “Yo creo que también hay que tener cuidado con los efectos llamada, porque el engranaje para hacer un buen ajuste de las plazas y del personal es muy complejo”, señala Sánchez, que considera que esto podría “repercutir en los derechos actuales de los ciudadanos españoles”.

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"La falta de médicos en España no se puede suplir con los MIR extracomunitarios"

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Para él, facilitar la inserción de los MIR extracomunitarios a los hospitales Españoles no debe ser en ningún caso el método para paliar la falta de profesionales del sector. “Para solucionar ese problema lo que hay que hacer es una buena planificación con recursos propios, ya que tenemos una alta tasa de egresados en las universidades españolas”.

“Por otro lado, también hay que ver cuántos son los MIR que se puedan ir al extranjero y que se reespecializan, es decir, MIR efectivos que no son como tal porque vuelven a entrar en el sistema de formación, y eso se convierte en una perdida de bolsa de trabajo que se debe tener en cuenta a la hora de actuar sobre los condicionantes de esa decisión, que pueden ser las malas condiciones laborales, la precariedad, entre otras”.

“La falta de médicos no se puede suplir con los MIR extracomunitarios, esto solo sería un parche y no es el objetivo, si eso se cambia se modificarían las reglas del juego y nos moveríamos en un contexto internacional diferente y más complejo”, afirma.

Familia, la excepción que rescata a estos MIR

La especialidad de Medicina de Familia presenta una serie de particulares para estos MIR, que cuentan con un pequeño periodo de tiempo entre que finalizan su residencia y se termina su permiso de residencia en España. María José Gamero, vocal de la junta directiva de Semergen, explica que, por lo común, los médicos de Familia no suelen tener problema a la hora de conseguir un contrato que les permita, posteriormente, permanecer en el país.

“Su formación es adecuadísima, y es la misma que la de los MIR comunitarios, que es lo que defiende Semergen" comenta. "Es la administración de quien depende facilitar esos contratos”, señala la vocal de esta sociedad.

“He hablado con MIR extracomunitarios especializados en Medicina de Familia y no han tenido problemas para conseguir un contrato de trabajo que les permita también obtener la residencia”, comenta. “En otras especialidades con más saturación puede haber más problema, pero en Familia no los hay”.

“Tienen pocos meses para conseguir un contrato de trabajo, pero los de Familia, concretamente, no están teniendo problema porque tenemos mucha demanda”, aclara Gamero.