Estudiantes de Medicina reprochan a Educación que se abran más facultades

Los estudiantes de Medicina han reclamado a Íñigo Méndez de Vigo, ministro de Educación, Deporte y Cultura, que se reúna con ellos y escuche sus propuestas, una protesta que comparte todo el colectivo de estudiantes universitarios.

El 14 de julio de 2017, en Madrid,se celebró tras dos años, el Consejo de Estudiantes Universitarios (Ceune), órgano de deliberación, consulta y participación de los estudiantes ante el Ministerio de Educación participando en el mismo los Consejos de Estudiantes del Estado y la Coordinadora de Representantes de Estudiantes de las Universidades Públicas (Creup). “Es deber del Ministerio convocarlo tres veces al año. No solo no se convoca con la frecuencia que se debe, sino que el Ministro de Educación, Cultura y Deporte, Iñigo Méndez de Vigo, quien preside el Ceune, no asistió. Compañeros y compañeras representantes estudiantiles de otros 16 Consejos de Estudiantes de España han realizado una sentada en las instalaciones del Ministerio, pasando la noche en el mismo, exigiendo que el ministro acuda y escuche las propuestas del estudiantado, no recibiendo respuesta por su parte”, ha indicado el Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM).

“El Ministerio de Educación, Cultura y Deporte hace caso omiso a las propuestas estudiantiles. En nuestro caso, ello se puso de manifiesto en el Ceune cuando uno de nuestros representantes preguntó al Secretario General de Universidad el motivo de la apertura de la Facultad de Medicina de Vic con la aprobación por parte del Ministerio en la Conferencia de Política Universitaria cuando anteriormente el Ministerio se comprometió para no abrir más facultades de medicina. Nuestro representante en el CEUNE no recibió respuesta alguna”, indican los estudiantes en un comunicado.

“A la situación del sinsentido de la apertura de nuevas facultades de medicina, se suma la precariedad en el sistema educativo, siendo que la cuantía media de la beca por estudiante ha caído un 20 por ciento entre los años 2013 y 2015. España invierte en becas un 0,13 por ciento del PIB, menos de la mitad que la inversión media en becas de los países de la OCDE. Más de 100.000 estudiantes han sido expulsados de la universidad por motivos económicos en este proceso. Las becas no deben ser un premio sino un garante del acceso equitativo y justo a la universidad”, continúa.