De padres a hijos: cuando el examen MIR se vuelve una "tradición familiar"

Como si de un legado familiar se tratara, en esta edición del examen MIR 2024 muchos padres y madres sanitarios que ya se enfrentaron a esta misma prueba años atrás han querido acompañar a sus hijos que sueñan con ser facultativos especialistas, al igual que sus seres queridos. Quienes se presentaron a la prueba hace años, recuerdan sentir los mismos nervios e ilusión que ven ahora en sus hijos, aunque reconocen que cada año la prueba parece "más exigente", sobre todo en el desarrollo de la preparación.

Es el caso de Gema Ruiz, matrona en el Hospital Materno-Infantil de Jaén, que ha acompañado este sábado a su hija para examinarse del MIR 2024. Asegura a Redacción Médica que el estudio ha sido "muy intenso", lleno de momentos difíciles por no poder compartir celebraciones importantes en familia, pero los nervios "han sido mutuos" y le recuerdan mucho a los mismos sentimientos que vivió ella misma durante su preparación EIR: "Yo la he entendido durante todo el proceso porque también he pasado por esas noches sin dormir. Hice el EIR y sé lo difícil que es intentar superar este examen y el número de orden que necesitas para poder conseguir la especialidad que de verdad quieres".

Gema reconoce sentirse orgullosa de que su hija quiera continuar con la "tradición familiar" de dedicarse a la sanidad. "Me gusta que se dediqué a lo mismo y que le guste, porque es una profesión muy difícil, en la que se pasan muy malos ratos y que, hasta que se sitúe en el sitio que quiera estar y en la especialidad que le guste, todavía le quedan muchos años porque es difícil lograrlo todo desde un primer momento. Pero yo creo que ella es muy constante y el espíritu de sacrificio que tiene le va a ayudar a conseguirlo", asume.

Sobre la diferencia entre ambas pruebas, explica que ella preparó su prueba con la misma academia con la que lo ha hecho su hija en esta ocasión: "El MIR es mucho más denso, mucho más largo y mucho más difícil, pero sí es verdad que funciona con el mismo tipo de simulacros y el temario te lo van dando igual".

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"Me hace feliz que esté luchando por cumplir el mismo sueño que yo tuve hace años"

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Gestión del MIR "en familia"

Gabriela Narváez, médica intensivista en el Hospital de Sanchinarro y en el Ramón y Cajal, ha acudido al MIR 2024 para acompañar a su prima que ha venido directamente de Ecuador para examinarse este sábado. Reconoce que toda la familia "ha vivido con nervios" esta preparación y además, también para la intensivista es un día "para recordar": "Hoy hace diez años de mi examen MIR, por lo que también para mí es un día emocionante. Para mí esta jornada me hace revivir los nervios del examen, la preparación del mismo día que yo protagonicé hace diez años. Supuestamente tienes que acostarte tarde para levantarte tarde pero desde las 8:00 ya estás dando vuelta en la cama, controlar lo que comes, estar tranquila, he visto todo esto en mi prima y ha sido como revivir la experiencia otra vez", recuerda.

Para la médica, es muy especial que su prima esté luchando por su mismo sueño y siempre le recomienda "que disfrute lo que hace". "Sé que si lo consigue, lo que le espera es muy bueno, a pesar de que lo que tiene que pasar hoy es muy difícil, con muchos momentos de estrés y nervios, estos se van a acabar pronto y todo lo que viene después sólo es bueno", asegura. Además, otro de los consejos que ha dado a su prima es que gestione bien los nervios para no convertirse ella misma en su peor enemiga.

"Recuerdo que para mí las primeras 15 preguntas del MIR fueron las más difíciles porque dudé mucho, quería asegurarme de contestar bien pero siempre estaba en bucle y llegó un punto en que ví que el tiempo corría y cuando te das cuenta de que tienes que contestar y no queda otra, te relajas y vas con más confianza. Por eso es mejor no perder el tiempo en las primeras preguntas, seguir hasta el final y volver a revisar cuando termine el primer barrido", recomienda.

Un MIR que aumenta en dificultad

Para José y Míriam, padres médicos que este sábado también se pasaban por el examen MIR para apoyar a su hija que se examinaba, la preparación ha sido muy intensa, y ellos han ejercido el papel de acompañamiento para evitar que se pusiera nerviosa. "Creo que ahora van muy bien preparados, antes lo hacíamos más por nuestra cuenta, pero ahora lo tienen mucho más estructurado", señala la madre.

José reconoce que la preparación era distinta, ya que en ese momento tenía que compaginarla con el servicio militar, algo que ya no se hace, y las academias eran más básicas. "Pero al final es parecido porque te juegas tu futuro", asegura. Otros padres sanitarios recuerdan que su MIR fue "menos estresante" que el de ahora, ya que hace 25 años la prueba era "un trámite más" y ahora tiene "un mayor peso".