"Dentro de 10 años, el sanitario que no esté en redes sociales no existirá"

Dentro del mundo de la Formación Sanitaria Especializada tanto los aspirantes como los que ya son residentes tienen a sus "ídolos" particulares en las redes sociales. Estos divulgadores sanitarios, además de profesionales médicos, enfermeros, farmacéuticos, o psicólogos, entre otros muchos, plasman el día a día de su trabajo y analizan la actualidad sanitaria en Instagram, X o TikTok. Sin embargo, han alertado a los futuros residentes, en las Jornadas PostMIR de CTO, del cuidado que deben tener como sanitarios en las redes sociales.

Álvaro Fernández, farmacéutico conocido en las plataformas como @farmaceuticofernandez, lo tiene claro: las redes sociales se pueden generalizar, pero "no son una consulta donde se pueden resolver dudas sanitarias concretas". "Las redes no son el sitio ni la vía, no puedes resolver aquello que no te compete en estas plataformas. En las redes puedes captar algunas pautas pero realmente nadie está intentando resolver tu problema y si te paso algo debes ir al médico antes de diagnosticarte nada en casa", ha señalado el farmacéutico durante las Jornadas PostMIR de CTO, poniendo el ejemplo de las ocasiones en las que, por estar en el foco mediático, hay seguidores que le han hecho consultas que no eran de su competencia.

Álvaro Fernández, farmacéutico y divulgador sanitario (@farmaceuticofernandez)

David Callejo, médico especialista en Anestesiología y Reanimación y profesor de CTO (@davidcallejo10).

Para este farmacéutico, la alianza entre divulgación científica y redes sociales "no es la alianza perfecta", pero es una alianza "necesaria", que tiene que existir y adaptarse a los tiempo actuales. Una misma opinión que comparte David Callejo, médico especialista en Anestesiología y Reanimación y profesor de CTO, que también divulga contenido sanitario en redes: "Nosotros somos una generación que lleva el móvil en el bolsillo, pero vosotros lo lleváis en la mano. De aquí a diez años, el sanitario que no esté en redes sociales, no estará y nosotros cuando empezamos, se nos miraba mal".

Sobre la relación entre divulgadores sanitarios, Callejo ha apuntado que hay una "buena relación", pero ha alertado de la actual corriente de divulgadores jóvenes que, para viralizar su contenido, "son capaces de coger el contenido de otros y manipularlo", algo que cree que también ocurrirá en la divulgación científica.

Psicología y Psiquiatría - Patricia Ramírez y Rosa Molina

Dentro del campo de la Psicología, la profesional del sector y divulgadora sanitaria Patricia Ramírez (@patri_psicologa) ha analizado el papel que juega la salud mental en esta exposición a las redes sociales y la tendencia creciente a dejarse llevar sin freno por las emociones y los "lemas de vida" que pueden alejarse de la realidad: "Se ha puesto e moda escuchar tanto las emociones que puede llegar a bloquearnos. Estamos tan metidos en mirar para nosotros mismos que nos olvidamos de cuidar el exterior. En cuanto a las frases hechas como que hasta que no te quieras tú mismo no podrás querer a los demás, hay que tener cuidado con promover estados emocionales como si fueran la normalidad porque a lo mejor no lo son".

Rosa Molina, médica especialista en Psiquiatría y divulgadora sanitaria (@dr.rosamolina).

Patricia Ramírez, psicóloga y divulgadora sanitaria (@patri_psicologa).

Para ella, la "alianza perfecta" realmente es divulgación científica, redes sociales y valores ya que hay personas que divulgan ciencia "pero no tienen los valores como el respeto a la profesión, tener una credibilida y que haya honestidad con aquello que se divulga". "De cada diez vídeos en TikTok, ocho son falsos. Ojalá hubiese una clave para diferenciar un bulo de lo que no lo es, porque muchas de las personas que consultan en las redes, lo hacen de forma vulnerable y les sirve cualquier consejo que alivie su sufrimiento", especifica.

Por otra parte, la psiquiatra Rosa Molina ha alertado a los MIR que, en el futuro, deben tener control de todo aquello que deseen divulgar en redes relacionado con la profesión, apelando al consentimiento informador del paciente: "No puedes contar una historia clínica con todo lujo de detalles. Debéis recordar que los profesionales que manejan la divulgación científica en redes sí estamos formados en los aspectos éticos pero hay otros que no y eso genera un aluvión de problemas".

María Hernández, bioquímica especialista en Nutrición y Salud Pública (@futurlife21).

Elena Pérez, bioquímica, bióloga molecular y especialista en alimentación y nutrición (@futurlife21).

Las redes buscan normalidad en los divulgadores sanitarios

Las dos divulgadoras sanitarias de @futurlife21, Elena Pérez y María Hernández, apuestan por la normalidad a la hora de actuar como 'influencer' sanitario. "Cuando empecé creía que iba a perder profesionalidad o que tenía que cambiar de alguna forma, pero he visto que hoy en día, lo extraordinario es ser normal y eso es lo que más atrae a las personas al mundo sanitario. Necesitamos un profesional normal, que nos trate de forma cercana, que se preocupe por el paciente y no todo es transmitir información científica, también mostrar el cariño y las ganas de ayudar", aclara Pérez.

"A mí lo que más me enfada de las redes sociales es que hay que hablar con mucho cuidado y el algoritmo te puede enseñar a gente que no conoce tu forma de transmitir, por lo que tienes que tener cuidado con las palabras que usas. Muchas veces, si no tienes exquisito cuidado, te pueden hundir rápidamente", concluye Hernández.

Instante de la mesa redonda 'Divulgación científica y RRSS, ¿la alianza perfecta?' en las Jornadas PostMIR de CTO.