El proyecto monitorizará a más de 300 pacientes para mejorar su calidad de vida y la tasa de supervivencia

La farmacia comunitaria y hospitalaria se unen para mejorar la adherencia a los medicamentos de personas trasplantadas.
Ana Sangrador, Ismael Escobar, Jesús Aguilar, Beatriz Domínguez, Raquel Martínez y Ana Belén Martín. Foto: Cgcof.


23 jul. 2024 11:50H
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De los casi 6.000 trasplantes de órgano sólido que se realizan en España cada año, entre el 20 y 54 por ciento de los pacientes trasplantados no consiguen cumplir de forma adecuada los tratamientos inmunosupresores para evitar su rechazo. Para resolver esta situación, desde la farmacia comunitaria y hospitalaria se unieron hace dos años en el proyecto JunTOS y, ahora, han dado el primer paso con la puesta en marcha de un estudio de investigación que tiene como objetivo mejorar la adherencia al tratamiento y la calidad de vida de estas personas.

Jesús Aguilar, presidente del Consejo General de Colegios Farmacéuticos (Cgcof), ha recordado que España es "líder mundial" de trasplantes de órganos con 5.800 el año pasado, pero que se enfrenta a uno de los índices de tratamiento "más bajos": uno de cada dos pacientes no lo consigue cumplir. “Precisamente esa falta de adherencia está considerada la principal causa de rechazo del órgano trasplantado y esos datos exigen de iniciativas que se puedan desarrollar para evitar su abandono, y la respuesta ha sido este estudio”, ha resaltado.

Este proyecto de investigación ha comenzado a principio del mes de julio con la colaboración de colegios farmacéuticos de Cantabria, Baleares y Tenerife. El estudio durará tres años y se pretende 'arrojar' los primeros resultados a principios de 2025. “Vamos a monitorizar a más de 300 pacientes trasplantados. Estamos seguros de que los resultados van a avalar el trabajo científico, el de la farmacia comunitaria y hospitalaria para mejorar su calidad de vida y su tasa de supervivencia”, ha afirmado.

Ismael Escobar, delegado en Madrid de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (Sefh), ha intervenido en la presentación y ha explicado que el estudio consta de ‘tres patas’. La primera, situar al paciente en el objetivo y foco de su actividad clínica y asistencial. “Los farmacéuticos clínicos queremos estar a su lado, dando igual el ámbito en donde se encuentre, como la Atención Primaria, el domicilio…”, ha subrayado. En segundo lugar, ha resaltado el espíritu colaborativo y multidisciplinar entre los compañeros del ámbito sanitario y, por último, la importancia de la investigación. "El método científico es el mejor camino para avanzar en el conocimiento, por lo que desarrollar un proyecto así, con cronograma, método de investigación y los objetivos es el mejor camino para que eso pueda trasladarse a la comunidad científica y progreso”, ha afirmado.

Reclutar a 316 pacientes de órgano trasplantado


Por el momento, ya han comenzado con las formaciones a los farmacéuticos que van a participar en el estudio y se prevé reclutar a 316 pacientes trasplantados de órgano sólido, como de riñón, corazón, hígado o páncreas, entre otros. Y, de esta forma, ayudarles a aumentar su cumplimiento del tratamiento inmunosupresor definiendo, mejorando su ruta asistencial y haciéndoles un seguimiento.

Este proyecto también ha contado con el avalal de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT). Su directora, Beatriz Domínguez, ha anunciado que, durante los seis primeros meses del 2024, en comparación con los del año pasado, se ha aumentado un 10 por ciento las personas trasplantadas en nuestro país. “Vemos que la situación de España es de absoluto privilegio dentro del ámbito europeo, y de cualquier país internacional”, ha indicado.

Este liderazgo es a causa de tres elementos: la solidaridad de la población, el Sistema Nacional de Salud (SNS) que permite que “cualquier paciente” que necesite un trasplante pueda acceder a ello sin “ningún tipo de discriminación”, y, por último, el modelo organizativo y gestión del proceso de personas fallecidas que donan sus tejidos.

Un proyecto para mejorar la calidad de vida de los trasplantados


Sobre el proyecto, desde la ONT afirman que “no han tenido ninguna duda” sobre la iniciativa que pretende poner sobre la mesa esas realidades de adherencias terapéutica y de cómo se puede mejorar la calidad de vida de este tipo de pacientes. "Necesitan terapia inmunodepresora de por vida. Son pocos los que desarrollan tolerancia y no lo necesitan. Por lo tanto, es normal que entren en una batalla contra el propio sistema inmune que tiende a rechazar lo que identifica como extraño y que, además, provoca el riesgo de presentar problemas como, entre otras cosas, diabetes”.

Otro perfil que ha intervenido en la rueda de prensa es Ana Sangrador, vocal Nacional de Farmacia Hospitalaria y miembro del grupo Farmatrasplante de la Sefh. Durante su turno, ha recordado que existen una "gran cantidad de factores" que no son viables para los trasplantados, como la enfermedad o la situación socioeconómica, entre otros. Pero lo que sí que hay son factores dependientes del tratamiento farmacológico. “Son de una elevadísima complejidad terapéutica y hay un factor modificable gracias a la influencia de los farmacéuticos, que eleva la efectividad de los medicamentos”, ha indicado.

Porcentaje de adherencia en el trasplante de órganos


En este sentido, ha subrayado que, durante los seis primeros meses de trasplante hay un porcentaje “muy alto” de adherencia, pero luego va bajando. Por este motivo, la primera medición que se hará en este estudio de investigación se hará tras ese tiempo. Además, como medidas desde la Farmacia para evitar que los pacientes rechacen ese tratamiento, ha resaltado que se pueden establecer rutinas, proporcionar pastilleros, ofrecer una educación continua e, incluso, a modificar tratamientos para disminuir esos fectos secundarios y que disminuya la adherencia, entre otras opciones.

Raquel Martínez, secretaria general del Consejero General de Colegios Farmacéuticos (Cgcof) ha subrayado que ya se han reclutado 14 pacientes que participarán en la investigación. “Estamos contentos e ilusionados”, ha afirmado. Asimismo, ha trasladado que el reclutamiento está dividido en dos cohortes: los incorporados por la farmacia hospitalaria y acaban de recibir un trasplante, y los que llevan con el injerto desde hace seis meses y han sido traídos por la farmacia comunitaria”.

Por último, en la presentación de la investigación ha intervenido Ana Belén Martín, responsable de Cohesión Asociativa de Alcer, quien ha resaltado que, cuando llega el trasplante a un paciente, es necesario formarle sobre hábitos saludables y sobre la medicación. “Lo tiene que entender para llevarlo mejor (…) Ahora, con este nuevo proyecto, nos van a enseñar a llevar toda la medicación y que nos expliquen los motivos de por los que tenemos que tomarla, y es que estamos en riesgo de perder el trasplante y volver a la diálisis", ha concluido.
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