Prospecto electrónico y prevención para evitar escasez de fármacos

Industria, agencias de medicamentos y agentes sanitarios. Este sería el tridente necesario para poder abordar un problema mantenido en el tiempo como es el desabastecimiento de fármacos y una de las soluciones que dejaban las expertas que han intervenido en la última mesa de debate del X Encuentro de Farmacia Hospitalaria, procedentes, de hecho, de cada una de las áreas mencionadas. Una colaboración a tres bandas que debe ir encaminada a la puesta en marcha de acciones preventivas, comunicación y un conocimiento adecuado de las causas que conducen a esta escasez, con consecuencias negativas para profesionales y pacientes. 

Durante su intervención en el panel titulado ‘El problema de desabastecimiento, ¿qué soluciones podemos adoptar?’, Esther Cobo, jefa del Área de Control de Medicamentos de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), ha insistido en la importancia de conseguir una "coordinación transversal con el resto de agentes implicados, tanto a nivel europeo como a nivel nacional". 

Esther Cobo, jefa del Área de Control de Medicamentos de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps).

Su lista de propuestas también sitúa en un segundo escalón a la prevención, primera línea de actuación de la entidad, como pilar clave en la erridación de complicaciones en los suministros. El tercer escalón estaría ocupado por la gestión. Según la responsable, una vez que el problema es inminente, hay que dar una buena información para paliar esta "situación crítica" como es la falta de stock, tal y como ha desgranado en su intervención durante el evento organizado por Redacción Médica con el auspicio de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH) y la colaboración de Bayer, Gilead y MSD.

Prevención y mecanismos de solución

La jefa del Área de Control de Medicamentos de la Aemps ha indicado que para aplicarla es necesario conocer las causas que pueden desencadenar un desabastecimiento como los problemas de fabricación o de suministro de principios activos, entre otros. "Afortunadamente, más del 95 por ciento de problemas de suministro nos lo notifican los laboratorios, cuando nos llega por otra parte, como pueden ser de los hospitales, las comunidades autónomas, las farmacias, etc., cuando nos llega de otro agente es cuando tenemos el lío formado porque el problema de suministro ya ha llegado al paciente”, ha indicado.

En estos casos, los pasos a seguir serían verificar la existencia de competidores y contactarlos para conocer si pueden aumentar su producción y que así "no se note en el mercado". Además, la experta ha especificado que se hacen paradas de exportación a terceros países y de comercio intracomunitario, aunque esto "no suele ser un problema de los medicamentos hospitalarios". 

Otra de las soluciones planteadas es la armonización de la distribución de fármacos entre los distintos países del entorno. Esto se podría conseguir a través del prospecto electrónico, ya que permitiría enviar dotaciones destinadas a un determinado país, a otro que lo requiere con mayor urgencia sin encontrar las barreras idiomáticas que acostumbran a aparecer cuando se trata un producto manufacturado para un lugar específico. Iniciativas de pueden ayudar a agilizar el propio mercado farmacéutico, según han explicado las ponentes.

"Lo normal es que haya un problema de suministro y no una escasez de medicamento, que es de lo que se habla a nivel europeo", ha matizado Cobo. En ese sentido, ha detallado que la escasez de un medicamento es "una situación en la que el suministro es inferior a la demanda a nivel nacional". 

En cuanto a los tipos de medicamentos que suelen verse impactados por problemas de suministro, ha resaltado que aunque en el número de notificaciones que tienen, "los de fármacos hospitalarios no son los más numerosos, aunque cuando se ve el porcentaje de hospitales autorizados que sufren problemas de suministro, sí que es la categoría que más sufre y que más impacta en los tratamientos de los pacientes”.

Problema global y aplicación autonómica

"Se trata de un problema que es global”, ha advertido, en su turno, Lucía Fuster, técnica del Servicio de Prestación Farmacéutica Hospitalaria e Inspección Farmacéutica de la Gerencia Regional de Salud de Castilla y León. Además ha detallado que es un desafío "muy complejo porque es multifactorial y tiene un impacto negativo sobre el paciente y sobre el sistema sanitario". En este caso, la profesional ha detallado que todas las iniciativas que se siguen desde las comunidades autónomas se hacen en coordinación con la Aemps, que es la que lidera las intervenciones sobre el abastecimiento.

"Se acuerdan unan directivas y cada comunidad las articula en su medio con las herramientas que tiene", ha explicado, poniendo como ejemplo el hecho de permitir la sustitución de formas farmacéuticas en las oficinas de Farmacia o implantar medidas adicionales que garanticen el acceso a determinadas medicamentos. 

Lucía Fuster, técnica del Servicio de Prestación Farmacéutica Hospitalaria e Inspección Farmacéutica de la Gerencia Regional de Salud de Castilla y León

Montserrat Pérez, jefa del Servicio de Farmacia del Hospital Fundación Alcorcón (Madrid)

Por su parte, Montserrat Pérez, jefa del Servicio de Farmacia del Hospital Fundación Alcorcón (Madrid), ha considerado que se tiene que desterrar la palabra "problema y más bien cambiar el escenario a una manera positiva" porque en España "se tiene acceso a medicamentos". "Lo que tenemos que conseguir es que estos escenarios, esta cronificación de escasez de algunos medicamentos, sea lo menos posible o, por lo menos, no tenga un impacto en la salud de nuestros pacientes", ha aseverado

Difícil solución a ojos de la industria

"A veces podéis pensar que somos los culpables. Pero, os aseguro que, para nosotros, las complicaciones con el suministro o la escasez son también un sufrimiento", ha señalado la directora de calidad de la farmacéutica Bayer, María José Sambola, para desterrar así el posible 'dedo acusador' que sobrevuela, en ocasiones, sobre el sector. Y es que, este mal, supone para las empresas no cumplir con la misión de mantener un avituallamiento de medicamentos continuado, lo que deriva en un problema normativo, al no llegar a los plazos, y económico, al no facturar. 

La representante de la compañía alemana ha sido las más escéptica al hablar de este tipo de complicaciones al asegurar que la resolución ni es cercana ni posible. "La verdad es que el 100x100 de la solución a este problema no va llegar y menos mañana. Hay que aprender a vivir con ello y manejarlo de la mejor manera posible", ha lamentado Sambola.

María José Sambola, directora de Calidad de Bayer

Bajo su punto de vista, la pérdida de tejido industrial en Europa -la producción de principios activos se lleva a cabo principalmente en países del Lejano Oriente- hace que conseguir una manufactura estable de fármacos sea "casi imposible". También afecta que la fabricación de materiales básicos para la venta de medicamentos -desde el cartón de la caja hasta la tinta para su tipografía- se encuentre lejos del continente o la falta de materias primas en suelo europeo.

De esta forma, cualquier atisbo de inestabilidad en las fuentes de los mencionados productos deriva en el peor acceso a tratamientos farmacológicos. Un escenario al que se unen también las estrategias de las propias empresas. "Vamos a ser honestos, hay priorizaciones entre mercados", ha reconocido la ponente.

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"La verdad es que el 100x100 de la solución no va llegar y menos mañana. Hay que aprender a vivir con ello"

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Ante este panorama, Sambola ha remarcado que "hay que estar preparados y conocer las circunstancias". Por ello, la oradora, representante de la industria farmacéutica en la mesa, ha apreciado la distribución controlada de un determinado medicamento o el trabajo de identificación de futuras incidencias. Y es que muchas ocasiones existen problemas que se solventan antes de que sean publicados en el boletín de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (Aemps).

Respuesta de la Farmacia Hospitalaria

Durante la mesa, la especialista del servicio de Farmacia del Hospital Ramón y Cajal y del Instituto Ramón y Cajal de Investigación Sanitaria (Irycis), Carmen Palomar, ha propuesto soluciones contra la escasez de fármacos en su centro de trabajo. Para ello, la experta ha partido de las limitaciones principales que observa. Por ejemplo, un programa de gestión del medicamento muy básico, la elevada rotación del personal técnico, unos espacios de almacenaje reducido en comparación con el número de fármacos que aparecen cada año o la dificultad de encontrar sustitutos a las especialidades farmacéuticas, que crecen por encima de los fármacos que se comercializan. "Nuestro personal administrativo necesita dos o tres horas diarias para buscar alternativas", ha apuntado.

Carmen Palomar, especialista del Servicio de Farmacia del Hospital Ramón y Cajal (Madrid) y del Instituto Ramón y Cajal de Investigación Sanitaria (Irycis)

Desde su punto de vista, la Farmacia Hospitalaria puede ayudar a paliar este problema. Para ello, la clave está en actuar a tiempo. Por ejemplo, en el Hospital Ramón y Cajal han desarrollado una herramienta que les avisa cuando no cuentan con una determinada medicación para más seis días. "Nos da más tiempo para dar respuesta". ha señalado Palomar. También ayuda revisar constantemente las publicaciones de la Aemps respecto a la falta de determinados productos, con la misión de poder realizar un seguimiento, comprobar el estado de sus propias reservas y tomar medidas si fuera necesario. Este trabajo documental les permite establecer protocolos de actuación de gran variedad, algunos para medicamentos en situación crítica o para la reubicación de compuestos que no se emplean tanto.

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"Nuestro personal administrativo necesita dos o tres horas diarias para buscar alternativas"

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Por otro lado, la comunicación es fundamental para la ponente. "Usar herramientas a nivel interno del hospital es importante. Nos ha permitido ganar en velocidad e inmediatez. Cualquier anomalía que detecto se la derivo directamente al personal técnico", ha explicado. De esta forma, se activa la búsqueda de fármacos de manera más veloz.

En un futuro no muy lejano le gustaría establecer más medidas ante un problema que no deja de crecer. "Queremos utilizar la lista de los medicamentos estratégicos de Aemps para asegurar que el hospital cuenta con posicionamientos terapéuticos consensuados alternativos a dicho producto. Así, podremos solucionar la incidencia con mayor rapidez", ha argumentado la profesional del centro madrileño. La cuestión está en ser imaginativo, indica. "El farmacéutico de hospital no elige las incidencias que le vienen, pero sí que está en nuestra mano pensar y aprovechar esta amenaza y convertirla en una oportunidad", ha sentenciado.

Aspecto de la sala durante el debate 'El problema del desabastecimiento, ¿qué soluciones podemos adoptar?'