La "presión implacable" empeora la salud mental del estudiante de Medicina

Un estudio publicado por BMC ha revelado las principales barreras a las que se enfrentan los estudiantes de Medicina y que tienen un impacto directo en su salud mental. Estas abarcan desde la dificultad para encontrar información referida al bienestar, hasta los procesos largos de estudio y las listas de espera para recibir ayuda. Además, estos alumnos se enfrentan también a grandes preocupaciones relacionadas con la confidencialidad y el miedo a ser juzgados que, junto a una presión académica, desembocan en problemas que les afectan a nivel emocional.

El informe, titulado "Explorando el acceso a servicios de apoyo para estudiantes de Medicina: recomendaciones para mejorar el apoyo al bienestar" pone de manifiesto una estrecha relación entre la exigente trayectoria académica de los estudiantes de Medicina y los problemas de salud mental. Es por este motivo que facilitar el acompañamiento y acercar a los estudiantes aquellos recursos necesarios para cuidar su salud mental se plantea como un objetivo crucial a la hora abordar eficazmente los desafíos que plantea esta carrera universitaria.

Salud mental de los estudiantes de Medicina

El estudio, que tiene como objetivo "explorar las percepciones y la utilización de las intervenciones de bienestar y los recursos de bienestar de los estudiantes de Medicina", identifica, según los alumnos, cuáles son las barreras principales que impactan en su salud mental. Uno de los temas que señalan fue la dificultad para encontrar información sobre bienestar, que los estudiantes describieron como el principal obstáculo para recibir apoyo.

Junto a este, los estudiantes consideran que los procesos largos y las listas de espera (a nivel general) se presentan como factores disuasorios a la hora de buscar ayuda. "Los estudiantes de Medicina buscarían ayuda cuando sus situaciones inmediatas la exigieran, pero los servicios de asesoramiento universitario a menudo estarían disponibles para ofrecer apoyo unas pocas semanas o meses después de que se hiciera el acercamiento", señala el estudio, una situación que provoca que los alumnos ni siquiera traten de acceder a estos servicios. 

Presión a la que se enfrentan los futuros médicos

Otra de las cuestiones que más preocupa a los futuros médicos tiene que ver con la confidencialidad y el miedo a ser juzgados. En concreto, el estudio señala que muchos estudiantes perciben el hecho de pedir ayuda como un signo de debilidad que podría provocar una "mancha negra" en sus expedientes académicos. La inquietud en torno a que se pudiera violar su privacidad y que esto afecte a sus futuras carreras los aleja aún más de la idea de buscar apoyo para cuidar su salud mental.

En esta línea, el entorno de aprendizaje también juega un papel crucial. Los alumnos, durante el estudio, reportaron que están sometidos a una "presión implacable" para sobresalir académicamente. Junto a esto, señalan que esta carrera está acompañada de una cultura que normaliza el estrés relacionado con los estudios de Medicina, la cual consideran como "tóxica".

Apoyo a los estudiantes de Medicina

A pesar de las barreras, el estudio señala que los estudiantes "parecieron apreciar un ambiente de apoyo cuando el personal estaba atento". "Cuando los estudiantes de Medicina lograron acceder a los servicios de asesoramiento universitario, informaron de una experiencia positiva y la encontraron significativamente beneficiosa" para cuidar su salud mental. Junto a esto, los vínculos familiares se presentan como una fuente clave de apoyo que ayuda a aliviar el estrés de estos alumnos.

En este sentido, con la idea de mejorar la accesibilidad y fomentar la búsqueda de ayuda, los estudiantes consideran que los servicios de bienestar deberían ser más proactivos. Una de sus propuestas se centra en que estos lleguen a los estudiantes en lugar de esperar a que sean los alumnos quienes busquen ayuda.

En total, este estudio se ha realizado con la participación de veinticinco estudiantes de Medicina, que se enfrentaron a entrevistas semiestructuradas y veintidós que participaron en grupos focales, con el objetivo de revelar las diversas barreras para acceder a recursos de bienestar.