La Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM).
El
primer examen de Medicina es el momento donde los estudiantes comprueban la dificultad de su
nueva etapa educativa. Esto consigue, en la mayoría de los casos, que sean conscientes de que ya no están en
bachillerato y que es necesario un
mayor sacrificio y dedicación para conseguir alcanzar el objetivo de c
onvertirse en médicos. El pasado viernes, los alumnos de la Universidad Complutense de Madrid (
UCM) vivieron ese ‘despertar’ con el
examen de Anatomía. Una prueba con la que estaban asustados por la dureza del temario y que semanas antes veían “muy complicada” para aprobar. Pero, ¿ha sido tan difícil cómo esperaban?
Elda Martínez, estudiante de primero, reconoce a
Redacción Médica que el examen no le salió “muy bien” pero que, según “todo el mundo”, tampoco fue tan difícil. “Yo reconozco que no supe cómo abordarlo. Estudié muchísimo y llevaba tiempo preparándolo, pero no he encontrado el método que tengo que usar para este tipo de pruebas y aún estoy intentando descubrirlo para que no me vuelva a pasar”, ha lamentado.
El
examen de Anatomía estuvo dividido en dos partes: la
teórica y la práctica. La primera consistió en
25 preguntas tipo test con una parte con dibujos de
cortes topográficos del cuerpo humano que había que identificar. En cambio, en la parte práctica los estudiantes se dividieron en
grupos de dos para identificar
estructuras anatómicas que estaban colocadas en
diferentes muestras.
Para Martínez, la parte teórica de los cortes topográficos la
desmoralizó completamente durante el examen. “Creo que nos pilló un poco sorprendidos a la mayoría. En vez de ser fotos reales eran dibujos”, ha afirmado.
Agobio durante el examen de Anatomía
A pesar de ese ‘shock’ inicial, esta estudiante dejó para el final la identificación de los dibujos e intento continuar con la prueba de la mejor manera posible, aunque ya se encontraba agobiada. “Lo restante del tipo test creo que me salió bien. Una cosa que agradezco es que
los fallos no restasen puntos, que en otras asignaturas sí lo ocurre”, ha explicado.
Más allá de la dificultad de los cortes topográficos, la queja generalizada entre los estudiantes del Grado fue el
poco tiempo que dieron para la realización del examen. “Solo nos dejaron
50 minutos, no fue ni una hora. Esto sí que lo hablamos entre todos y coincidimos en que quizás, con más tiempo, hubiéramos podido hacerlo mejor”, ha subrayado.
Sentimientos tras el examen de Anatomía
Tras terminar el ejercicio, Martínez se levanto de la mesa triste y salió de clase. Mientras caminaba por los pasillos de la universidad escuchaba a sus compañeros hablar sobre las respuestas de la prueba. “Yo no quería atender a los comentarios y me fui rápido a casa. Allí, mis padres me consolaron y me dijeron que no pasaba nada. Aún así, creo que he estudiado cosas que no eran muy relevantes y tengo que
cambiar la metodología para el siguiente”, ha reconocido.
Esa misma noche, Martínez y sus compañeros de clase
salieron a cenar y de fiesta para celebrar el haber acabado el primer examen de Medicina. “Fue muy divertido”, ha concluido.
La dificultad de la parte tipo test del examen de Anatomía
Pedro Martínez, compañero de Elda, también opina que la parte teórica de los cortes topográficos fue “muy complicada”. “Yo creo que el examen lo aprobaré, pero no voy a sacar un ocho o un nueve. La
sensación generalizada que tenemos es que
Anatomía fue bastante difícil”, ha deslizado.
Antes de entrar al ejercicio, él miraba a sus compañeros y los veía “
muy nerviosos”. Él, en cambio, estaba más tranquilo. “Es cierto que estaba un poco en tensión porque sabíamos que era una prueba importante y complicada, pero nada exagerado”, ha explicado.
Por desgracia, este estudiante no pudo celebrar junto a sus compañeros la realización del primer examen de Medicina. “Me hubiese encantado, pero nada más salir de la clase tuve que irme a trabajar. Espero que se lo pasasen bien”, ha resaltado.
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