El CGE ha resaltado que la concentración de humo afecta a la salud de conductores y acompañantes, sobre todo niños

El Consejo General de Enfermería ha demandado a Sanidad que prohíba que los conductores fumen dentro de sus vehículos particulares.
El presidente del CGE, Florentino Pérez Raya.


13 ago. 2024 11:40H
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El Consejo General de Enfermería (CGE) ha pedido al Ministerio de Sanidad que prohiba fumar en el interior de los vehículos particulares, especialmente en el caso de que viajen menores en ellos. Se trata de una de las principales alegaciones presentadas por el organismo durante el proceso de consulta pública del anteproyecto de ley para la modificación de ley 28/2005, del 26 de diciembre, de medidas sanitarias frente al tabaquismo y reguladora de la venta, suministro, el consumo y la publicidad de los productos del tabaco. Este trámite finaliza el 15 de agosto.

"Numerosos estudios científicos demuestran que la concentración de humo en espacios cerrados, como los coches, es muy nociva para los pulmones en desarrollo de los niños y niñas y que incluso las partículas cancerígenas permanecen adheridas a la tapicería durante mucho tiempo”, ha señalado el presidente del CGE, Florentino Pérez Raya, en el escrito de alegaciones. Además, ha añadido que el hecho de "abrir la ventanilla" no evita que el humo se concentre en el interior del vehículo, una afirmación que ha sustentado con distintos estudios científicos. 

No se trata de la primera vez que el CGE pide la prohibición del tabaco dentro de los coches. En 2018, el organismo colegial lanzó la campaña "Coche sin humo", desarrollada en el ámbito escolar, con el propósito de convertir a los menores en agentes de salud, por lo que se les hablaba de los perjuicios de fumar, para que luego lo transmitieran a sus familias. 

Para Pérez Raya, "un país que se considere avanzado" debe proteger la salud de su ciudadanía, especialmente de la población infantil, por lo que hay que apostar por medidas efectivas contra los peligros del tabaco -de las 7.000 sustancias que contiene el humo, 250 son muy nocivas y 70, además, cancerígenas. Precisamente, el 30 por ciento de muertes por tabaquismo pasivo en el mundo se dan en infantes, víctimas de los numerosos problemas asociados a fumar, como sibilancias, tos crónica, asma, bronquitis, infecciones severas, neumonía, otitis, obesidad o cáncer. 


Papel de las enfermeras contra el tabaquismo


Asimismo, el CGE ha solicitado también que se reconozca la importancia de las enfermeras en la lucha contra el tabaco. El ente ha demandado que se potencien sus funciones en la educación de la salud -para prevenir el consumo en edades tempranas- o la deshabituación tabáquica, ámbito en el que participan mediante la prescripción de fármacos en función de la guía de indicación, uso y autorización de la dispensación de medicamentos sujetos a prescripción médica en este ámbito aprobada por el Ministerio de Sanidad.

El presidente del organismo ha señalado que las profesionales que representa son clave en el abordaje del tabaquismo, ya que "su proximidad con los pacientes" les hace jugar un papel importante en la detección de fumadores y el consejo sistemático de abandono de esta práctica. "Es necesario potenciar su participación en este campo, en beneficio siempre de la salud de los pacientes y de la sociedad en general”, ha concluido.
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