Calma entre médicos y enfermeras por la indicación: "La confianza es mutua"

La crispación en torno a la indicación enfermera de fármacos sujetos a prescripción médica se ha hecho evidente en los últimos días. Mientras los organismos colegiales cruzan declaraciones e inician acciones legales, la tranquilidad acostumbra a ser el estado reinante en las plantillas. En hospitales y centros sanitarios, el choque entre médicos y enfermeras por la indicación de medicamentos por parte de las segundas parece inexistente -al menos a simple vista-. "La confianza y el respeto es mutuo", ha señalado a este diario Miguel Company, enfermero del Servicio Andaluz de Salud (SAS).

El profesional del ámbito de la Enfermería trabaja desde hace 32 años en la Unidad de Gestión Clínica de Serón, perteneciente al Área de Gestión Sanitaria Norte de Almería. Cuenta con la especialidad de Familiar y Comunitaria -obtenida por vía excepcional- e indica medicamentos desde que Andalucía avanzó en la implantación de las guías elaboradas por el Ministerio de Sanidad.

En su caso, nunca ha tenido ningún problema con sus compañeros facultativos para la indicación de fármacos. "Mi experiencia siempre ha sido buena", ha resaltado en referencia a la realización de esta competencia. La también enfermera de Familiar y Comunitaria del SAS, Bienvenida Gala, ha coincidido con su compañero. "Desde 2009 que comenzamos en Andalucía a indicar, los profesionales de Medicina de Familia lo incorporaron como parte de nuestro trabajo diario", ha revelado. 

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"Los médicos de Familia lo incorporaron como parte de nuestro trabajo diario", ha revelado Gala

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Asimismo, tampoco han sido víctima de las dudas de los pacientes, que aceptan de buena gana la opinión de los profesionales de Enfermería en materia de medicamentos. En parte, porque aligera la atención sanitaria y por ende reduce las esperas en los centros. "Al final, la indicación enfermera supone disminuir la demora en la asistencia de pacientes con ciertas patologías, a la par que reduce las dobles visitas y facilita un tratamiento más integral por parte del profesional de Enfermería", ha explicado Company.

Sin problemas con Enfermería, pero con opiniones diversas

Los profesionales de Medicina tampoco detectan ningún problema con Enfermería por este asunto. El médico del servicio de Urgencias del Hospital Universitario del Vinalopó (Elche, Alicante), Julio Armas, concuerda en que no existe un conflicto entre facultativos y enfermeras por este asunto, al menos en su centro. "No es un tema que se discuta demasiado. Hay asuntos que nos preocupan más como las guardias 24 horas, la precariedad laboral o el 'burnout'", ha afirmado.  

La cardióloga del Hospital Universitario de Toledo, Eva García, ha suscrito las palabras del facultativo de Urgencias. "En nuestro ámbito no hay ningún tipo de crispación. La relación con Enfermería es excelente", ha compartido con este diario. Desde su punto de vista, se trata más de un desacuerdo relacionado con la terminología que de "un problema real" y ha añadido que en su centro la distribución de funciones es clara y se sigue sin ningún inconveniente. "Nosotros en Cardiología trabajamos con enfermeros que realizan técnicas, al igual que los médicos, ecocardiograma y holter y todo bien. Cada uno tiene claro cuáles son sus competencias".

En la misma línea se mueve el facultativo de Urgencias del Hospital Universitario de San Juan de Alicante, Santiago Diéguez. "La polémica entre el personal de Enfermería y de Medicina es inexistente", ha afirmado. Eso sí, el sanitario ha verbalizado que su departamento cualquier indicación farmacológica pasa por el médico. "Cualquier indicación, aunque inicialmente y debido a una posible urgencia inmediata pueda realizarse de forma verbal, debe quedar reflejada por escrito en la historia clínica electrónica y más concretamente en el módulo de prescripción del programa del que dispone la Conselleria. Esa indicación requiere de una firma electrónica que se realiza con una tarjeta con los certificados que se configuran el primer día de trabajo de cada facultativo o residente en formación. Enfermería no dispone de esa tarjeta para esa función en Urgencias", ha añadido.

Los fármacos más indicados

Entre los tipos de fármacos que más indican Company y Gala en su día a día se encuentran los analgésicos, antiinflamatorios, antipiréticos y medicamentos para fomentar la cicatrización y tratamiento de heridas. En concreto, ibuprofeno, paracetamol y recetas de uso tópico para el cuidado de lesiones. También destaca la indicación de productos sanitarios, como absorbentes para incontinencia, tiras de glucemia para el autocontrol de pacientes diabéticos, apósitos para el tratamiento de heridas agudas y crónicas complejas o productos para ostomía.

No obstante, los profesionales de este ámbito pueden trabajar con más fármacos que los mencionados. Y es que el Ministerio de Sanidad cuenta con diez guías para la indicación enfermera de los medicamentos para las siguientes patologías: el tratamiento de heridas, diabetes mellitus uno y dos, hipertensión, quemaduras, ostomías, anticoagulación oral, fiebre, procedimientos diagnósticos o terapéuticos que requieren de anestésicos locales, deshabituación tabáquica e infección del tracto urinario inferior en mujeres adultas. Además, en breve, se prevé que llegue una nueva para tratar problemas reproductivos y sexuales.

Una serie de productos que toda la plantilla del centro de salud de Serón (Huércal-Overa, Almería) puede indicar, al contar con la acreditación que lo permite. Según datos del Consejo General de Enfermería (CGE), el 95 por ciento de las enfermeras que cuenta con más de un año de experiencia ya hace uso de esta capacidad, otorgada desde la publicación del Real Decreto 954/2015, de 23 de octubre, en el que se regula esta competencia enfermaría desde hace casi una década.

Avanzar más rápido

Pese a la progresión de la indicación enfermera, Company ha considerado que su implantación debería de avanzar con mayor celeridad, tanto en su comunidad autónoma como en el resto, ya que son estas las encargadas de incorporar las guías del Ministerio de Sanidad. Es más, el CGE ha denunciado que hay regiones que las agregan con "demasiada lentitud". "Es necesaria una apuesta firme, con respaldo legal y un apoyo explícito y sin vueltas atrás por parte de la administración. Así, se generaría más confianza a todas las partes implicadas", ha aseverado Gala.

Un progreso que también se ve frenado por las riñas entre los representantes de las profesiones sanitarias. "Nosotros no queremos entrar en conflicto. Entendemos el trabajo en equipo con algunas tareas compartidas con la profesión médica y otras totalmente independiente para cada profesión. En este caso, la indicación de fármacos para determinadas patologías supondría una labor compartida que irá en favor de la asistencia del paciente", ha explicado.

Entre los facultativos, Armas ha puntualizado que lo primordial es fomentar el trabajo en equipo par acabar con la saturación que padece el Sistema Nacional de Salud (SNS). "El sistema está colapsado y solo lo podremos sacar médicos, enfermeras, TCAE y el resto de sanitarios con el trabajo conjunto", ha agregado. Por su parte, García, pese a reconocer que "Enfermería y Medicina son aliadas y deben de trabajar en beneficio del paciente", también ha apuntado que la indicación enfermera no es la respuesta a la congestión del sistema. "No tiene ningún sentido suplir carencias asistenciales con medidas como estas", ha admitido.

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"El sistema está colapsado y solo sacaremos médicos, enfermeras, TCAE y el resto de sanitarios con el trabajo conjunto", ha indicado Armas

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En lo que la mayoría está de acuerdo es que la calma debe de reinar entre Medicina y Enfermería, aunque, no siempre, es fácil mantenerla. "Siempre existirá polémica cuando se entienda que un grupo ve invadidas sus competencias por otro ya sea en este asunto en lo que respecta a médicos/as y enfermeras; o, también recientemente, el rechazo que suscitaba a enfermeras que el profesorado pudiera administrar medicación al alumnado", ha opinado Diéguez. Bajo el punto de vista de Company, el problema no está en los pasillos del hospital, sino en otros lugares. "Somos dos profesiones que nos entendemos perfectamente en el trabajo asistencial. En ocasiones, la labor desempañada en los despachos es la que la que dificulta las relaciones entre los profesionales sanitarios", ha sentenciado.