María Jesús Montero, ministra de Hacienda en funciones; y Miguel Borra, presidente de CSIF.
Los últimos datos de empleo han vuelto a encender las alarmas en la administración: solo en septiembre se han destruido 49.300 puestos. Lo más preocupante, advierten los representantes de los trabajadores, es la tendencia a la desaceleración laboral que se atisba también en la afiliación sanitaria, según los últimos datos del Ministerio de Seguridad Social. En este escenario, la
Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha instado al gobierno en funciones a perfilar, de forma “urgente”,
nuevas oposiciones en las que la salud sea “cuestión nuclear”. Esta gran
Oferta Pública de Empleo (OPE), no obstante, se encontraría a expensas de la conformación de un Ejecutivo central.
“Sin Gobierno, cualquier medida como esta
se encuentra paralizada”, deslizan a
Redacción Médica fuentes de CSIF, que destacan que, aunque ya han solicitado una
reunión “urgente” con el Ministerio de Hacienda para comenzar a
trabajar en una nueva OPE, esta no se hará efectiva hasta que España disponga de un Ejecutivo.
Plantillas envejecidas y servicios tensionados en sanidad
La central apunta que la administración pública “destruyó el pasado mes de septiembre 39.505 puestos de trabajo” que se suman “a las 9.800 bajas registradas en el sector
específico de sanidad y servicios sociales”. Esto “arroja una cifra de 49.303 empleos perdidos”.
“De hecho, solo el empleo destruido el pasado mes supera en 10.000 el número de plazas que contempla toda la oferta de empleo público para 2023 en la Administración General del Estado, lo que da muestras de la gravedad de esta situación. Además, ya van dos meses consecutivos de
destrucción de empleo ya que en agosto se perdieron otros 11.121 puestos de trabajo en las administraciones públicas”, subraya.
En este escenario, inciden en que la sanidad debe ser “una cuestión nuclear” en futuras OPE dado el progresivo
“envejecimiento” de las plantillas y el consecuente
“tensionamiento” de servicios y unidades “fundamentales”.
Tanto CSIF como UGT y CCOO insisten además en la necesidad de avanzar hacia la supresión de la tasa de reposición, algo que también trasladarán en la próxima reunión con Hacienda.
Malos datos de empleo sanitario
La afiliación en el sector de las actividades sanitarias y de los servicios sociales cerró ‘en rojo’ septiembre con un retroceso de
9.800 puestos (el 0,52 por ciento), aunque de los datos del Ministerio de Seguridad Social se extraen también algunos datos positivos.
En concreto, el departamento que abandera
José Luis Escrivá informó de que en la sanidad y los servicios sociales hay
59.763 afiliados más (un 3,28 por ciento) que hace un año. Por otro lado, la evolución desestacionalizada del
empleo en el ámbito de la salud repuntó un 0,97 por ciento hasta los 1.273.012 trabajadores.
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