El 60% de horas extra en sanidad cae en mujeres y una de cada 4 no se paga

En el Sistema Nacional de Salud (SNS) son ellas las que realizan más horas ‘extra’, con casi 400.000 realizadas durante el tercer trimestre del año, aunque según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) hasta el 26,2 por ciento de estas se quedan sin pagar.

El último informe de la Encuesta de Población Activa (EPA) refleja que los profesionales vinculados a las actividades sanitarias y de servicios sociales realizaron en el tercer trimestre de 2023 un total de 661.100 horas extra, de las cuales se pagaron 517.600.

Según esta información, la mayor parte de las horas extra las realizaron las mujeres, con 397.100. Es decir, el 60 por ciento del total. Las profesionales sanitarias vieron recompensadas económicamente 292.800 de estas horas, pero 104.300 se quedaron sin pagar.

Por su parte, los hombres realizaron 264.000 horas extraordinarias, de las cuales se pagaron 224.800. Otras 39.200 no fueron remuneradas.
Esta situación tiene lugar en un escenario de aumento de la brecha salarial entre hombres y mujeres en el SNS, pues, según los últimos registros del Instituto Nacional de Estadística, la diferencia de sueldo supera la barrera de los 10.000 euros.

Brecha salarial en el SNS

En concreto, La encuesta anual de estructura salarial en España, con datos de 2020, fija en 10.290 euros la brecha salarial en el ámbito de las actividades sanitarias y los servicios sociales. De media, ellas perciben 25.957,39 euros anuales, mientras que sus compañeros perciben 36.248,27 euros. Esta diferencia de salarios se ha acrecentado en 951,82 euros respecto al ejercicio anterior.

Esta brecha salarial está vinculada en gran parte a los contrastes que existen todavía entre hombres y mujeres a la hora de alcanzar puestos directivos en un sector que, paradójicamente, sigue siendo eminentemente femenino.

A modo de ejemplo, un reciente informe del Servicio Andaluz de Salud (SAS) reveló que, pese a que siete de cada diez sanitarios son mujeres, el 32,95 por ciento de los cargos intermedios está ocupado por ellas. Otro estudio de la Sociedad Española de Directivos de la Salud (Sedisa) apunta, en la misma línea, que apenas tres de cada diez profesionales sanitarias ejercen cargos de gerencia o dirección.