Marta, aspirante al examen EIR 2024.
Si preparar el
examen EIR se torna difícil desde el primer momento, al hablar de la época de Navidades y comienzo de año, se podría decir que los aspirantes de enfrentan a la 'cuesta de enero', literalmente.
Marta, que está justo en esos últimos días antes de la gran fecha, explica a
Redacción Médica que a la Navidad se hace especialmente compleja porque, a la preparación del examen en una fecha "que no ayuda a centrarse" se suma tanto "el
cansancio acumulado como los nervios de que el examen está más cerca".
Sobreponerse al cansancio acumulado
"En general la cuesta final se me está haciendo cuesta arriba. Llevo ya mucho trabajando, hay uno temario, y se une a las ganas de poder hacerlo y
quitarse el peso de encima", relata Marta. Aun así, la aspirante dice que "en el fondo, muy en el fondo", también sigue teniendo ilusión "por conseguir un objetivo". En su caso, la especialización en Enfermería Pediátrica.
Siguiendo con las 'trabas' navideñas, Marta destaca que, tras tantos meses de preparación, la llegada de las fiestas "hace que cueste más concentrarse". "Se hace duro estudiar cuando lo que pide el cuerpo es pasar tiempo con los amigos y la familia", comenta. ¿Y qué hace para sobreponerse a ello y no bajar de ritmo? "Aferrarse a la
esperanza de que queda muy poco para poder hacer el examen".
"Es duro estudiar cuando lo que pide el cuerpo es pasar tiempo con los amigos y la familia"
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En el caso de esta enfermera, comenzó la
preparación con ayuda de una academia en marzo de 2023. Durante los primeros meses, hasta octubre,
compaginó los estudios con su trabajo en el hospital. "Esos meses fui con más calma y me propuse, al menos, ir siempre a las clases de la academia", explica.
De esta manera, pasó "unos meses muy cansados en los que tenía que hacer malabares constantemente". "Salía de trabajar toda la mañana y me iba a clase o al revés,
cuando terminaba de estudiar pasaba la noche trabajando", relata. Aun así, lo tiene claro: "Esta época no se me hizo tan dura como la última fase de preparación, que estoy viviendo ahora".
Cómo es la rutina de estudio de un aspirante EIR
Desde que Marta se dedica al cien por cien al estudio, la enfermera tiene una
rutina estricta: se levanta, va a estudiar a la biblioteca, vuelve a casa a comer y pasa la tarde de nuevo en la biblioteca. "Ahora que estoy muy cansada, lo que más me ayuda es ver
vídeos de repaso. Se me hace más ameno y logro concentrarme un poco más", da como consejo la aspirante.
De esta manera, Marta encara el
reto final de preparación del EIR cansada pero con un objetivo que mantiene su ánimo: llegar a ser enfermera especialista pediátrica.
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