Caras de circunstancia entre los aspirantes al
PIR 2025 a la salida del examen. “No entendemos de dónde han salido las preguntas”, asumían algunos de los futuros residentes de Psicología, que revelaron a
Redacción Médica las claves de una
prueba “rara” y alejada, aseguran, de los manuales de las academias.
No se molestaban los candidatos en disimular su
descontento tras el examen. “Ha sido
una mierda”, resumían, sin ambages, algunos de los jóvenes consultados por este periódico. Primero, porque “no se entendían la mitad de las preguntas”; pero también porque muchas de ellas eran ciertamente inusuales.
“Había muchas preguntas de autores que no se suelen hacer -avanza una futurible a PIR-. De la parte de Evaluación también había
algunas muy raras que ni nos sonaban”. Ocurre lo mismo con las cuestiones relativas a Tratamientos, que a juicio de esta aspirante fueron
“muy específicas”, lo que añadía dosis de dificultad a la prueba. Sí que se esperaban cuestiones de
Ética, de las que cayeron “un montón”.
El examen PIR 2025 ha incrementado, a su vez, las
preguntas clínicas, por ejemplo de las relativas a
tratamientos infantiles, algo que los aspirantes vinculan al
impulso de esta especialidad.
En términos generales, apuntan las fuentes consultadas, cundía la
“decepción” entre los jóvenes psicólogos. “Parece que nos hemos metido en un examen de cualquier otra especialidad en vez del PIR, porque
no entendíamos nada -aseveraron-. Muchas preguntas no sabíamos de dónde han salido, cuando lo corrijan las academias lo veremos porque los manuales que solemos utilizar no han saludo”. “Vamos, que no nos suenan”, concluyen.
Más plazas PIR en la convocatoria de 2025
No todo son malas noticias para los futuros psicólogos. Tal y como anunció el Ministerio de Sanidad, esta convocatoria PIR el número de
plazas se incrementó en un 11 por ciento hasta las 274. Una cifra que, eso sí, muchos siguen catalogando de “insuficiente”, como el Consejo General de la Psicología, que exige doblar la oferta.
De esta forma, el
PIR 2025 repartirá una plaza para cada 14,10 aspirantes, índice que en la pasada edición era del 15,56. Ambas cifras, aún así, están lejos de alcanzar ese "ratio ideal" que de cuatro candidatos por cada vacante para psicólogo interno residente que reclama el sector.
Respecto al reparto de plazas en las
comunidades autónomas, lo cierto es que es similar al de la edición anterior, con
Cataluña, Madrid y Andalucía a la cabeza seguidas de Aragón, Castilla-La Mancha y Galicia.
Respecto al examen, las academias recuerdan que a la hora de ser corregido
cada acierto suma tres puntos, mientras que
los fallos restan uno y las respuestas en blanco no puntúan. No obstante, la nota final del examen no viene tan solo de las soluciones. Si bien el 90 por ciento procede del total de la puntuación, el 10 por ciento restante se obtiene del expediente académico que se haya conseguido durante el grado en Psicología.
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