Sergio Vañó, miembro de la AEDV.
Sergio Vañó, adjunto del Servicio de Dermatología del Hospital Universitario Ramón y Cajal y miembro de la Asociación Española de Dermatología y Venereología, explica a
Redacción Médica que los profesionales han podido "
asistir a un aumento vertiginoso de casos de caída de pelo por estrés (llamado efluvio telógeno), muchos de esos casos tras haber pasado el Covid".
En lo que llevamos de pandemia, los dermatólogos han comprobado cómo la infección por SARS-Cov-2 se relaciona con diferentes problemas capilares. En primer lugar, es especialmente frecuente que después del Covid-19 se produzca una caída de pelo intensa llamada efluvio telógeno. Suele aparecer 2-3 meses después.
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Un estudio recientemente publicado por su grupo de investigación de Tricología del Hospital Ramón y Cajal, y coordinado por
Óscar Muñoz, describe una serie de 191 pacientes con efluvio telógeno tras infección SARS-CoV-2 confirmada. El 78 por ciento eran mujeres y el 84 por ciento había presentado fiebre. La latencia media entre el Covid-19 y el efluvio era de dos meses meses.
Además, más de la mitad de los pacientes presentaba un efluvio con una intensidad alta o muy alta. "Como dato interesante, un 14 por ciento de pacientes había presentado una infección asintomática. Basándonos en este dato,
recomendamos realizar un despistaje de infección pasada por SARS-CoV-2 con serologías en pacientes que acudan con un efluvio telógeno intenso no explicado por otras causas", añade.
Podría afectar al 50% de los pacientes
Con todo,
"no se conoce con exactitud" si es un síntoma más del Covid. "Pero podría llegar incluso al 50 por ciento de pacientes que pasan la enfermedad. Es una caída reversible, pero que puede ser muy intensa", explica.
La parte positiva es que, "en general esta caída
se resuelve sola sin tratamiento cuando pasan 3-4 meses, pero en casos más duraderos o más intensos puede ser de utilidad el minoxidil oral o el plasma rico en plaquetas".
Precisamente, tras la publicación del mayor estudio multicéntrico que confirma la
seguridad del minoxidil oral a dosis bajas, "está suponiendo una auténtica revolución en el tratamiento de diferentes formas de alopecia".
Alopecia androgénica y gravedad
Pero el efluvio telógeno no es lo único que están viendo relacionado al SARS-CoV-2 y la caída de cabello. Como ha señalado el dermatólogo en su propia página web, en los últimos meses se han publicado diferentes estudios que relacionan la
presencia de alopecia androgénica con un mayor riesgo de formas graves de Covid-19.
Esta línea de investigación se considera una hipótesis preliminar, por lo que necesitará ser confirmada en futuros estudios.
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