Tres médicos a juicio por la eutanasia a una paciente que simuló autismo

Tres médicos que aplicaron la eutanasia a una mujer en Bélgica tendrán que sentarse en el banquillo de los acusados. La paciente había alegado en su momento que su sufrimiento era "insoportable e incurable" y que padecía autismo, condiciones para que le pudiera ser aplicada la eutanasia bajo la ley nacional, algo que finalmente se llevó a cabo en abril de 2010. 

Sin embargo, diversas lagunas se han abierto en el procedimiento, especialmente por la aparición de las hermanas de la fallecida, Tine Nys, que alegaron que el sufrimiento de la fallecida estaba causado por un corazón roto tras un fracaso sentimental, y que Nys había declarado intencionadamente que era autista ante dos médicos y un psiquiatra. 

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Han sido acusados de no cumplir con las condiciones legales de eutanasia y podrían enfrentarse a penas de cárcel

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La paciente recibió la inyección letal solo dos meses después del diagnóstico de su autismo, a los 38 años. Su familia, que estaba junto a la cama cuando ocurrió, asegura que se violó la normativa puesto que nunca fue tratada por autismo y, por lo tanto, no se había determinado que sufriera de forma insoportable e incurable, el criterio que resulta clave para que se produzca la muerte por eutanasia. Además, Nys había sido tratada por problemas psiquiátricos 15 años antes de su muerte en 2010, y sus hermanas declararon a los medios que aquello estaba superado y que simplemente se sentía rechazada tras el fracaso sentimental. 

Ante esta situación, los tres médicos han sido acusados de no cumplir con las condiciones legales de eutanasia y envenenamiento, y podrían enfrentarse a penas de cárcel si se les declara culpables. 

Excepciones penales desde 2002

Este caso ha vuelto a abrir el debate sobre los riesgos de la introducción de la eutanasia, después de otro ocurrido en Gante en el que los fiscales holandeses presentaron cargos contra un médico que puso sedante en el café de una mujer de 74 años con demencia y que le inyectaron las drogas mortales al inmovilizarla porque se resistió. Este es el primer caso penal desde que se despenalizó la eutanasia en Bélgica en 2002. 

Según el abogado de los médicos, uno de ellos podría tener la necesidad de justificar su acciones, pero "los otros dos solo dieron consejos que no son vinculantes", aseguraba a un televisión belga. 

Las cifras han revelado un aumento del 13 por ciento en las muertes por eutanasia en el último año en el país, y se han duplicado desde 2011, lo que ha despertado la preocupación en el país y en vecinos de su entorno donde se propone modificar las leyes para introducir la eutanasia.