Solo se reconoce la responsabilidad penal del médico ante una falta de diligencia grave

Ricardo Martínez Platel / Imagen: Pablo Eguizábal. Madrid
En el ámbito penal es difícil que prosperen las demandas contra los médicos. Este es el mensaje que David Cubero, magistrado de la sección 16 de la Audiencia Provincial de Madrid, ha pretendido hacer llegar a los facultativos en el Foro Sanidad y Derecho, donde ha recordado que a pesar de que el número de reclamaciones ha crecido, las condenas son muy pocas.

David Cubero, magistrado de la sección 16 de la Audiencia Provincial de Madrid.

Cubero ha asegurado que "el temor del médico es infundado y no se ajusta a la realidad", puesto que para que un médico tenga responsabilidad penal debe existir una falta de diligencia muy grave por su parte. Sin embargo, el procedimiento en sí ya es un problema, puesto que obliga al afectado a pasar por la llamada 'pena de banquillo', lo que afecta a su autoestima y modifica su conducta, lo que supone que lleve a la práctica una 'medicina defensiva'.

El magistrado ha explicado que, en el ámbito penal, "los tribunales mantienen el mismo listón que hace 40 años". Es decir, debe ser una imprudencia grosera y clara. Pese a esto, también ha quedado de manifiesto que el cumplimiento de los protocolos no exime en sí mismo de la existencia de responsabilidad, ya que deben adaptarse con criterio a los pacientes.

Dentro de los hechos más controvertidos que pueden dar pie a posibles demandas están el consentimiento informado, no utilizar los medios disponibles y la inconsistencia documental. Cubero ha reconocido que hay muchas demandas infundadas, no falsas, que en muchas ocasiones se deben a que el paciente o sus familiares no saben qué ha ocurrido, por lo que el magistrado ha destacado que la información es fundamental para evitar pasar por un proceso de estas características.